RETRODEZCAN

Este imperativo es del todo incorrecto pero me resulta más contundente que el original RETROCEDAN. Por lo tanto, si la Real Academia de la Lengua Española me lo permite, desde hoy en adelante haré uso exclusivo de él.
Con RETRODEZCAN pretendo dar a conocer parte de mi obra pictórica, escultórica, fotográfica y, en menor proporción, literaria y, a la vez, mantener una corriente de opinión sobre los acontecimientos de naturaleza artística de hoy día.
Espero que tomeis la sabia decisión de manteneros a una distancia prudencial de mis opiniones aquí vertidas que no siempre tienen por que ser del agrado de la mayoría; ¿o, sí?

viernes, 18 de octubre de 2013

LA GUITARRA DE CHARLIE RIVEL




La réplica del diputado del PP a la intervención de un miembro de la oposición no se hizo esperar.

-¡¡Payaso!! -le increpó el del PP.

-Ya me gustaría a mí ser Charlie Rivel -replicó el de la oposición- para romperle la guitarra en la cabeza.

-¡Señoría! por favor, -le reprendió el Sr. Presidente- absténgase de hacer apología de la violencia

-Hacer apología de la violencia, -rectificó el aludido,- no sería decir que le rompería la guitarra en la cabeza, sino que  le rompería la cabeza con la guitarra; que no es lo mismo pero sí es lo que su señoría se merece.

domingo, 6 de octubre de 2013

CAN QUIMET (El Bar de las Guitarras)


CAN QUIMET o el Bar de las Guitarras estaba situado en la Rambla del Prat, si mal no recuerdo, frente al Cine Bosque en la zona del barrio de Gracia.

Su propietario disponía de multitud de instrumentos musicales (viento, percusión, cuerda, etc., etc.) al servicio de la clientela que supiera tocarlos y por ende amenizar las tardes-noches a cargo de los muchos músicos que pasábamos por allí en nuestros dias de asueto que, también, eran muchos y solían coincidir con los fines de semana.

El Bar en cuestión ya no existe. En su lugar se ha abierto una peluquería que con la crisis no se si ha de durar mucho tiempo.

Yo empecé a frecuentarlo en la década de los sesenta en compañía de mi primo Luis pero ya, por aquel entonces, llevaba bastante tiempo abierto. Su propietario a la sazón era QUIMET quién en la foto aparece tocando el acordeón en honor a nuestra presencia aquel día.

La foto está tomada por mí en una delas visitas que mi padre hizo a Barcelona por aquella época.

Era frecuente, a altas horas de la noche, encontrarse allí con algún cantante o músico de los muchos que actuaban en los teatros de Barcelona por entonces. Tal era el caso, por ejemplo, de Lola Flores y el Pescadilla entre otros.

A mis 67 años, echo mucho de menos aquella Barcelona que me enseñó a ser adulto.

miércoles, 2 de octubre de 2013

MIGUEL MARTÍN alias "EL OREJAS": IN MEMORIAM

A Miguel Martín siempre le llamaron por su alias: "El orejas" pero todos sabíamos que el nombrete en cuestión sólo hacía alusión a su finísimo oído para la música y no al tamaño de sus orejas que, por otro lado, siempre estaban cubiertas de una abundante y negra cabellera.

Su sentido del humor era ilimitado, tanto como su exquisita fantasía para la improvisación musical.

He de decir que nuestra amistad no era tan estrecha como cabe suponer pero sí que coincidíamos a menudo en el Puerto de la Cruz dónde compartíamos amigos comunes con una gran capacidad para el humor que jamás dejábamos de practicar; por si las moscas.

Resulta lógico pensar que todo aquel que lea esta sencilla reseña, de sobra podrá imaginar que Miguel formó parte de LOS SABANDEÑOS durante un largo periodo de tiempo y del que se escindió más tarde por razones que desconozco en profundidad pero de las que guardo una ligera sospecha.

Por aquel entonces también fué componente del trio que acompañaba a Mª DOLORES PRADERA y en alguna ocasión me pareció verle actuando en TV.

De las causas de su fallecimiento jamás tuve noticias pues yo andaba entonces por Barcelona, a bastante distancia de las desagradables noticias que circulaban en torno a la salud de algunos de mis buenos amigos.

Traigo a colación esta breve introducción porque dos escritores tinerfeños, Gonzalo Hernández y Francisco García, piensan editar en breve un libro titulado LOS SABANDEÑOS. LAS OTRAS VOCES DEL MITO dónde en uno de sus capítulos rescatan la figura de Miguel con toda justicia para rendirle el homenaje que siempre se mereció no sólo por su entrañable personalidad sino además por ser uno de los guitarristas más finos y precisos de los muchos que por aquellos años contribuyeron al enriquecimiento de nuestro folclore canario.