RETRODEZCAN

Este imperativo es del todo incorrecto pero me resulta más contundente que el original RETROCEDAN. Por lo tanto, si la Real Academia de la Lengua Española me lo permite, desde hoy en adelante haré uso exclusivo de él.
Con RETRODEZCAN pretendo dar a conocer parte de mi obra pictórica, escultórica, fotográfica y, en menor proporción, literaria y, a la vez, mantener una corriente de opinión sobre los acontecimientos de naturaleza artística de hoy día.
Espero que tomeis la sabia decisión de manteneros a una distancia prudencial de mis opiniones aquí vertidas que no siempre tienen por que ser del agrado de la mayoría; ¿o, sí?

viernes, 7 de septiembre de 2018

EL NUEVO PRESIDENT


Poco tiempo después de aquel sonado 1º de Octubre de 2017 durante el cual tuvo lugar la fallida declaración de independencia en la Generalitat de Catalunya, los miembros más destacados de cada uno de los dos partidos más relevantes del panorama político catalán, Puigdemont y Tardà, no tardarían en reunirse en un discreto pueblecito del Ampurdan para acordar entre ellos la conveniencia de una supuesta candidatura de un nuevo presidente para el país antes de que el elegido entonces emprendiera su huida hacia Bélgica aprovechando la proximidad de la cordillera pirenaica del lugar de la cita y después de haber declarado aquello de “Asumo el mandato del pueblo de que Cataluña se convierta en un estado independiente en forma de república” 

A tal efecto tendría lugar un ancestral ritual, muy propio de los países catalanes, mediante el cual y tal como se aprecia en la foto, los implicados, a pleno sol, harían sonar durante unos minutos sendas campanillas de bronce, -cuyo sonido simboliza las aspiraciones por las libertades republicanas sin conquistar-, ante la misma sede de aquella logia masónica a la que desde su nacimiento pertenecen.

Advertidos previamente, dos avezados fotógrafos bajo la nómina del Kiosco Insular de Tenerife lograron hacer, de forma furtiva, acto de presencia en el lugar de los hechos con el único propósito de tomar testimonio gráfico de aquel histórico eventual encuentro. La mala fortuna, tal y como se aprecia en la foto, quiso que ambos fueran descubiertos en última instancia por el propio Puigdemont en el momento en el que finalizaba la secreta ceremonia y aunque no se tiene constancia plena de ello la prensa internacional continúa especulando con la posibilidad de que tales reporteros, cuyo misterioso paradero aún se desconoce, hubieran sido apresados y conducidos al interior de la logia poco después de que las fotos tomadas fueran enviadas por ellos mismos a los distintos medios de comunicación tanto locales como internacionales a través de un sencillo teléfono móvil. 

El personaje que aparece a la izquierda no es otro que el actual presidente de la Generalitat Quim Torra quien por aquel entonces habría sufrido una traumática afección facial que le marcaría para siempre y de la que aún hoy se resiente a menudo, sobre todo, cuando se dirige a los distintos medios de comunicación con esa mueca de asco para pronunciarse sobre la necesidad imperiosa de independencia para Cataluña.

jueves, 6 de septiembre de 2018

PESIMISMO CATALÁN

Con las últimas declaraciones del Sr. Torra, presidente de la Generalitat de Catalunya, en el sentido de que no acataría una sentencia de culpabilidad del Tribunal Supremo para los políticos catalanes presos por supuesta sedición, dando a entender la posibilidad de ponerles en libertad si éstos fueran definitivamente condenados, ha provocado tanto estupor y malestar en la ciudadanía que la mayoría de medios de comunicación de medio mundo ya no sólo lo tratan de consumado cobarde como han venido haciéndolo hasta ahora sino, además, de provocador nato al exclusivo servicio de ese otro presidente en el exilio que no en la cárcel, Carles Puigdemont.

Joan Tardà, de Esquerra Republicana, ya ha puesto el grito en el cielo al quejarse, y con razón, de que sin contar con ese otro, aproximadamente, 50% de catalanes constitucionalistas, no se podría llevar a cabo el proceso de la independencia de Cataluña de la manera unilateral descrita en la hoja de ruta confeccionada en su día por el huido Puigdemont en connivencia con el resto de partidos políticos de carácter estrictamente nacionalistas.

Por todo ello, la fractura de carácter político abierta en virtud de las diferencias últimamente habidas entre los distintos postulados esgrimidos por cada uno de los diferentes partidos catalanes y todo ello sumado a la continua inactividad permanente de la Generalitat, ha contribuido de tal manera al desasosiego sufrido por la sociedad catalana que ya comienza a percibirse un hastío notable cuando no una impaciencia reprimida entre todos aquellos que llegaron a creer en su momento que el tan cacareado procés independentista terminaría por tener un efecto mucho más contundente e inmediato que el sufrido hasta ahora.

RESPONSABILIDAD

Cuando hubo llegado el momento y tras la aplicación del controvertido artículo 155 de la Constitución, varios de los políticos implicados en la truculenta declaración de independencia de Cataluña, hubieron de asumir con honor sus responsabilidades y aún hoy, por tal participación, sufren prisión provisional en cárceles de Cataluña a la espera de juicio. Otros, sin embargo, no afrontaron esa responsabilidad que tanto caracteriza a los valientes y se conformaron con emprender cobardemente la huida para luego instalarse cómodamente en tierras de Bélgica y desde allí pretender dar lecciones de lealtad y patriotismo a aquellos otros que, a pesar de todo, permanecieron firmes en la tierra que les vio nacer. 

Puigdemont y los demás huidos, no se atreven de ninguna manera a transitar confiados por su amado territorio por temor a perder la cómoda libertad de la que gozan en los países bajos mientras sus otros colegas continúan sufriendo el amargo trago de permanecer todavía bajo custodia aunque, afortunadamente, lo hagan en cárceles de su propia tierra.

De todos es sabido que poco antes del naufragio, son las ratas las que primero tratan de ponerse a salvo antes de zozobrar el barco pero también es cierto que para evitar que los roedores suban a bordo desde el puerto mientras el barco permanece amarrado, existe un pequeño y sencillo artilugio de metal y de forma cónica o de embudo que se coloca con la circunferencia abierta orientada hacia tierra en cada una de las maromas que mantienen el barco amarrado al noray del muelle, impidiendo así su paso.

martes, 4 de septiembre de 2018

OTOÑO CALIENTE

Si el verano que hemos pasado recientemente ha sido ya de por sí bien caliente desde el punto de vista meteorológico, desde el punto de vista político, este Otoño, sin embargo parece serlo aún mucho más a juzgar tanto por las promesas del presidente de la Generalitat, Sr. Torra para con los suyos como por el malentendido generado a raíz de las declaraciones vertidas por el presidente Pedro Sánchez en TV en relación a una promesa hecha al gobierno catalán de ofrecer la oportunidad de la celebración de un referéndum en favor de un nuevo estatuto de autonomía y que los partidos de derechas, tanto PP como Ciudadanos, se han empeñado en interpretar como una puerta abierta del PSOE a los partidos independentistas para que éstos vuelvan a insistir en la ruta que se han marcado al través del llamado procés como vía en el futuro de una declaración de república independiente de Cataluña.

Si a todo ello sumamos la intensa crispación que se está produciendo en Cataluña por el uso de unos y defensa de otros de los espacios públicos ausentes de símbolos amarillos, no cabe duda que, efectivamente, disfrutaremos de un Otoño, como ya auguran algunos analistas políticos, bien calentito.

De modo y manera que entre la aprobación de los presupuestos generales del Estado y las exigencias de la Generalitat de Catalunya, el gobierno no lo tendrá nada fácil para consumar con cierto desahogo esta legislatura conseguida gracias a las supuestas prebendas que algunos partidos interesados pretenden conseguir a cambio. En cualquier caso, a través de este callejón sin salida por el que pretende transitar el PSOE sólo le queda un recorrido temporal que según se prevé no durará más allá de 2019, de modo que las elecciones previstas para el 2020 no alcanzarían sus expectativas ni su meta deseable.

lunes, 3 de septiembre de 2018

PLAZA DE TOROS "LA RUEDA" (Puerto de la Cruz)


Al otro lado de la carretera general, frente al barrio de San Antonio, este pequeño y modesto coso taurino que no plaza de toros propiamente dicha fue el primero y único que se construyó en el Puerto de la Cruz gracias a la iniciativa de un joven emprendedor holandés de nombre Frank que se establecería en los años 60 en la ciudad durante mucho tiempo para, posteriormente, asentarse en la Isla de la Gomera con el producto de los beneficios obtenidos con sus negocios en Tenerife.

Antigua calle de Las Damas, hoy Enrique Talg. Lugar donde se encontraba ubicado el Bar La Rueda


Frank había llegado al Puerto prácticamente con lo puesto y lo primero que hizo con sus pocos ahorros fue montar un bar que en aquel entonces tendría entre la juventud del lugar una repercusión y un éxito sin precedentes. Se trataba del Bar La Rueda, situado al final de una callejuela, conocida hoy como Enrique Talg, que merced a una empinada escalera desembocaba en  la calle La Hoya. Un discreto Bar cuyas paredes interiores estaban cubiertas de troncos de pino sin pulir así como las mesas y sillas. Al fondo una pequeña barra de las mismas características que el resto de la decoración y el mobiliario hacía las veces de bar, con una pequeña plancha donde cocinaba salchichas y huevos fritos amén de servir todo tipo de bebidas alcohólicas, desde cervezas hasta whiskys.

Seguiría siendo su propietario pero mucho más tarde lo arrendaría a un joven alemán de nombre Norbert que lo explotaría durante algunos años más.

Foto de Norbert, arrendatario del Bar LA RUEDA

Frank era un joven alto, simpático y atractivo a la par que inteligente. Casi siempre acompañado de dos magníficos perros, pastores alemanes ambos, que causaban tanto respeto como miedo. Mientras le conocí se mantuvo soltero aunque tuvo muchísimas amigas de muy distintos países. Sin embargo no era un gran gastador. Sus ahorros solía invertirlos en bolsa y en otro tipo de pequeños negocios que le aportaban por lo general pingües beneficios.

En ocasiones y como medida publicitaria, organizaba en su casa divertidos guateques a los que eran invitados sus clientes más asiduos, españoles y extranjeros,  y que solían durar hasta bien entrada la mañana siguiente.

Tuvo la visión de poder ofrecer al turista de entonces una experiencia taurina única a cambio del precio de una entrada. Montó el coso taurino en cuestión, contrató a un banderillero español de nombre Manolo y compró media docena de vaquillas a las que los cientos de asistentes pretendían torear por turnos bajo la protección del novillero. De cuando en cuando y tal como muestra la foto organizaba también novilladas con banderillas y sin picadores, para regocijo de un público que jamás había asistido a una corrida de toros ni a una vivencia semejante.

Salvando las distancias, el éxito obtenido con aquella primitiva idea taurina fue similar al éxito que despierta hoy en día la llevada a cabo por el propietario del LORO PARK.

POLICÍA MUNICIPAL DEL PUERTO DE LA CRUZ

La Policía Local del Puerto de la Cruz carece de coches patrulla para cumplir con la seguridad ciudadana

Estos últimos días he podido hacerme eco de la noticia con la que encabezo este artículo doméstico que atañe en concreto y muy directamente al Consistorio del Puerto de la Cruz y que tanto me choca por cuanto siempre la Policía Local del municipio me pareció suficientemente dotada de efectivos. Bien es verdad que eran otros tiempos en los que tal vez la delincuencia no resultaba tan numerosa como hoy y que un puñado de agentes bastaba para controlarla y mantenerla a raya.

Era la época en que todavía todos nos conocíamos y resultaba harto difícil no estar reconciliados con unos agentes que por lo regular cumplían bien con su trabajo a pesar de algunas reticencias juveniles respecto de sus maneras en materia de seguridad ciudadana.

Este comentario venido ahora a colación me sirve como pretexto para mostrar un ejemplo de la tranquilidad con las que todos nos tomábamos nuestro trabajo; incluidos los agentes de la autoridad.

En esta otra foto, el agente Correa, natural de Los Rechazos, regula el entonces tráfico rodado en la Plaza del Charco para que este feliz turista, recién llegado en las condiciones de ebriedad que se aprecian, no sea atropellado por ningún vehículo despistado.

Resulta una muestra de la benignidad de la Policía Local para con todos los ciudadanos, fueran éstos borrachos extranjeros o sobrios portuenses y viceversa.



miércoles, 29 de agosto de 2018

¡OIGA, COMPADRE!


-¡Oiga, compadre! Se lo tengo dicho. No se preocupe usted de lo que dicen por ahí sobre nosotros. Hemos terminado de trabajar y nos merecemos una cuartita de vino tinto como cualquiera. Lástima de que no tengan un poquito de cherne para acompañar; por lo que parece, hemos llegado algo tarde aunque, a decir verdad, nunca es tarde para unos tragos que es por lo que según usted, se nos critica tanto y tan duramente.

-Mientras no aparezca por aquí la guardia civil, a mí me da lo mismo lo que digan por ahí. Yo no he matado a nadie, ni siquiera al cosechero que arruina nuestra salud con este vinagre barato a siete pesetas la cuarta. Pero qué le vamos a hacer: de algo habrá que morir, ¡digo yo!

-Si me dan a escoger, yo prefiero morir de un infarto que de cirrosis porque dicen que no te enteras ni te da tiempo de arrepentirte de nada, de modo que según los curas, iría uno directo al infierno pero, aun así, lo prefiero.

-No se preocupe, que el infierno no existe. Se lo han inventado los curas para vivir a costa nuestra ¿o acaso cree usted que ellos no comen ni beben como nosotros? Lo que pasa es que llevan sotana y no se les nota pero yo conocí a uno que murió de cirrosis y tuvo tiempo de arrepentirse. Aun así, me han dicho que ese sí que se pudre en el infierno porque sus pecados parecían tan graves que ni Dios fue capaz de perdonarle; aunque insisto: el infierno no existe.

EL MUNDO ES UN PAÑUELO

No cabe la menor duda de que como bien dice el refrán, “el mundo es un pañuelo” de tal manera que, -según un amigo jocoso que tengo-, “la gente suele meter la nariz dónde no le importa”.





Sin embargo este no ha sido el caso del turista holandés en Barcelona que sin proponérselo siquiera metería la nariz dónde realmente debía, advirtiendo a las autoridades españolas de la presencia en un bosque cercano a la ciudad condal de un compatriota suyo buscado por la policía de su país por violación y asesinato desde hacía ya veinte años.


La pederastia continúa siendo para muchos uno de los peligros principales que acechan a los niños de todo el mundo y ya no cuesta tanto admitir que, en muchos casos, los menores se ven totalmente asediados e indefensos frente a aquellos que tienen la obligación y el deber de velar por ellos; me refiero a monitores, entrenadores, sacerdotes, profesores, etc. que, la mayoría de las veces, terminan siendo además sus abusadores, violadores y, cuando no, también sus asesinos. Es el caso de este monitor holandés de campamento hallado gracias a que “el mundo es un pañuelo”, y lo será mucho más gracias, precisamente, a la proliferación de las redes sociales en internet (no hay mal que por bien no venga) además del uso del móvil en la vida cotidiana de las personas. Sin embargo, el paso más importante dado en los sistemas de investigación policial ha sido, sin duda, el contar con el descubrimiento que significa el poder obtener el ADN de cualquier individuo y situarlo inmediatamente en la escena del crimen como sospechoso.



En este caso, el ADN, a través de sus familiares ya se había obtenido; sólo faltaba encontrar al sospechoso y gracias, insisto, a que hoy en día “el mundo es un pañuelo” han dado por fin con su paradero y oportuna detención.


martes, 28 de agosto de 2018

ANIMALES EN EL ASFALTO

Una vez llegados de vacaciones al Puerto de la Cruz, la aventura que suponía para estos niños nórdicos montar por vez primera en los camellos de Lázaro consistía en toda una experiencia.

La presencia de animales en las calles del Puerto de la Cruz corrió a cargo, fundamentalmente, de los fotógrafos ambulantes de la época. Aún no habían salido al mercado los teléfonos móviles con objetivos incorporados, además de otros muchos aparatos digitales y muchos de aquellos fotógrafos brindaban a los turistas la oportunidad de ser fotografiados con un cachorro de león, un pequeño orangután o un papagayo de vistosos colores como si la fauna autóctona canaria consistiera también en eso.

Lázaro, sin embargo, ofrecía paseos por el Puerto de la Cruz a lomos de sus camellos por un módico precio, en ocasiones por sólo la voluntad. Y así se ganaba la vida, como casi todos, honestamente, pero a diferencia de los fotógrafos ambulantes de la época, Lázaro lo hacía gracias a un animal que en Canarias prestó siempre un gran servicio a sus propietarios en todos los sentidos: en el campo y en la construcción, además de en otras muchas faenas por entonces vinculadas principalmente a la agricultura.

Pero los burros también tuvieron su protagonismo en una ciudad que aún le costaba despegarse de ciertas tradiciones heredadas de los abuelos. Era el caso de la presencia de los lecheros y lecheras en el casco urbano que a lomos del animal transportaban grandes lecheras con el producto de sus propias vacas o cabras para vender a granel, puerta por puerta, en el Puerto de la Cruz y otros distintos municipios del entorno.

El impacto visual que representaba un par de camellos sobre el asfalto resultaba, a ojos del turista, casi grotesco porque el mismo Lázaro, ya de por sí, con su camisa blanca, eterna corbata y sombrero negros, no se correspondía precisamente con aquella otra romántica imagen que Laurence de Arabia había despertado en la imaginación de la mayoría de todos nosotros.

domingo, 26 de agosto de 2018

FCO. MARHUENDA & EDUARDO INDA


Me avergüenzo al confesarlo pero he de admitir que siento un profundo desprecio por estos dos periodistas caricaturizados. Me refiero al niño Francisco Marhuenda y al bandolero Eduardo Inda. Al primero porque tengo la impresión de que en el colegio, siendo niño, aprovechaba la ocasión de que el resto de compañeros se encontraban entretenidos jugando al fútbol en el recreo para robarles miserablemente el bocadillo para una vez finalizado el encuentro responder que él no había sido. Es decir, que en realidad, siempre ha tenido cara de “yo no fui”, ¿no? Y esa partícula negativa-interrogativa de ¿no? con la que culmina cada una de las frases que articula en su discurso me hace suponer que ni él mismo se cree lo que dice. Pero ahí siguen cada vez, en el plató de TV de la 6ª NOCHE, tanto él como Eduardo Inda, haciéndonos creer que en España no hubo nunca un dictador y si lo hubo no fue, en cualquier caso, tan sanguinario como Hitler, Mussolini, Stalin, Pinochet, Videla, etc., etc. ni porque él quisiera serlo sino porque en aquel momento nuestra sociedad civil se lo merecía.

El salvador de la patria, el caudillo, el generalísimo, el único a quien su jardinero en el Pardo, prácticamente analfabeto, le llamaba don Claudio porque al no tener, -según decía-, la suficiente confianza todavía con él como los demás, no se atrevía por el momento a llamarle Claudillo que era como al dictador le llamaban sus ministros y que según los muchos manuales de Historia que tanto Marhuenda como Inda se han venido leyendo a lo largo de sus insulsas vidas, incluida también la Wikipedia,  no figura en ningún lugar como el militar que en su momento propició un sanguinario golpe de estado para convertirse por la Gracia de Dios en  el Adalid de la Patria.

En las décadas de los años 40 y 50 y por dos motivos bien distintos, ningún listo se atrevía a robar los bocadillos de sus compañeros mientras estos jugaban alegremente en el recreo: primero porque los niños de entonces no éramos “robones” o “rateros” y segundo porque lo que se dice bocadillos, hasta muchos años después, no existieron como tales aunque sí en forma de pan con aceite y azúcar y cosas así como comentaban nuestra pobres madres entre ellas.

De modo que por boca de estos dos bandoleros de la información, ahora me entero que lo que yo y otros cuantos millones de españoles sufrimos durante más de cuarenta años no fue lo que se entiende como una férrea dictadura militar. ¡Quién lo iba a decir!

Eduardo Inda antes de tahúr fue bandolero. Después de un tiempo terminaría cortándose el cabello y engominándolo a conciencia y hasta la coronilla, se afeitaría luego la espesa barba de años aunque se dejaría patillas para enmarcar bien su lívido y enjuto rostro de patibulario aparentemente redimido. Almidonaría más tarde los cuellos y las bocamangas de sus camisas, se haría con un pasador de corbatas de oro y remataría los ojales de los puños con unos gemelos, también de oro, a juego con el pasador y provisto por último de una preciosa americana de terciopelo azul en cuyo interior guardaba la hueca Holy Bible que contenía el revólver de plata, viajaría luego por todo el medio Oeste vendiendo elixires, ungüentos, linimento y pomadas con cuyas ventas obtendría unos suculentos beneficios con los que amasaría una envidiable fortuna que algo más tarde, después de acabar la carrera de periodismo en Texas A&M University Commerce y trabajar durante un cierto tiempo para el New York Daily News, finalizaría empleándola en las numerosas mesas de juego abiertas a lo largo del rio Mississippi, desde Minneapolis a Baton Rouge, hasta retirarse definitivamente en la vieja España, de donde era natural su bisabuelo materno. 

EPÍLOGO

Queridos ignorantes e ilustres enemigos Marhuenda e Inda:

Como bien podréis comprobar, también yo, al igual que otros muchos españoles  disponemos de la suficiente imaginación como para alterar el curso de los acontecimientos e incluso de vuestras propias vidas en nuestro propio beneficio. Otra cosa bien distinta sería que alguien terminase creyéndonos.