RETRODEZCAN

Este imperativo es del todo incorrecto pero me resulta más contundente que el original RETROCEDAN. Por lo tanto, si la Real Academia de la Lengua Española me lo permite, desde hoy en adelante haré uso exclusivo de él.
Con RETRODEZCAN pretendo dar a conocer parte de mi obra pictórica, escultórica, fotográfica y, en menor proporción, literaria y, a la vez, mantener una corriente de opinión sobre los acontecimientos de naturaleza artística de hoy día.
Espero que tomeis la sabia decisión de manteneros a una distancia prudencial de mis opiniones aquí vertidas que no siempre tienen por que ser del agrado de la mayoría; ¿o, sí?

martes, 2 de septiembre de 2008

PERSONAJES POPULARES (final)

Para finalizar con tanta desgracia ajena, el optimismo y la resignación que denota el personaje dota a la imagen de mucho más dramatismo del que a priori parece, al presentar su rostro esa expresión de optimismo que nadie espera de él.
De su cruel fatalidad lo único que ha conseguido es convertirla en su "modus vivendi".
De todas maneras, estas también son imágenes de aquel Puerto de la Cruz boyante, rico, cosmopolita pero que además padecía de un sustrato social de pobreza, miseria y desgracia para lo que nunca pudo, o no supo, encontrar soluciones que lo erradicaran del todo.

4 comentarios:

  1. PEDRO DE VERA

    Eduardo Pedro García Rodríguez*

    En los primeros años del Renacimiento el semisalvaje Continente Europeo comenzaba a descubrir mediante las traducciones al Latín, la literatura, ciencia y filosofía griega, árabe y hebrea.

    Durante más de mil años los cristianos en Europa habían vivido en el oscurantismo y robándose unos a otros, pero durante este periodo comenzaron a expandir sus mentes hacia las posibilidades de hacerse ricos a costa de otros pueblos.

    Mediante el Tratado de Tordesillas el Papa divide el mundo en dos y manda a los españoles y portugueses a "ganar el mundo para Cristo". Para los Reyes Católicos como así también para la Iglesia, la evangelización era una excusa para justificar la conquista, que además de un enclave estratégico podría proporcionar esclavos y el oro que llegaría a las arcas del rey y a los altares de las iglesias.

    Se fijó el meridiano de partición del Océano Atlántico a 370 leguas al oeste de las islas de Cabo Verde, sin hacer referencia a las Azores. De esta forma, España tendría el dominio del hemisferio occidental y Portugal del oriental. Se había concretado así un verdadero reparto del mundo entre estas dos coronas. Por supuesto, ambas coronas tendrían que responder al poder Papal.

    Los cronistas de la invasión, conquista y colonización de las Islas Canarias por las hordas europeas, al ser la mayoría de ellos frailes cristianos se abstuvieron de recoger en sus crónicas los aspectos más sórdidos de las acciones militares llevados a cabo en nuestras islas por aquellas mesnadas de mercenarios españoles. No obstante, la mayoría de los historiadores concuerdan en que acciones de aquella guerra declarada unilateralmente por España a la Nación Canaria, y especialmente las desarrolladas en la isla de Chinet (Tenerife) la última en ser invadida y sometida al colonialismo español, sirvieron como laboratorio o campo de experimentación para las posteriores desarrolladas en la conquista y depredación de los pueblos americanos. Por lo dicho, es indudable de que los horrendos y crueles hechos protagonizados por las hordas españolas en aquel continente guardan un total paralelismos con las anteriormente ejecutadas en Canarias, mediante los cuales fueron bárbaramente destruidos los modos de vida de la sociedad guanche.

    Siguiendo dicho paralelismo podemos hacernos una idea de las brutales acciones desarrolladas por las "civilizadas" tropas españolas y sus acompañantes en nuestras islas reproduciendo algunos párrafos de la obra del fraile español Bartolomé de las Casas:

    "Entraban los españoles en los poblados y no dejaban niños ni viejos ni mujeres preñadas que no desbarrigaran e hicieran pedazos. Hacían apuestas sobre quién de una cuchillada abría un indio por medio o le cortaba la cabeza de un tajo. Arrancaban a las criaturitas del pecho de sus madres y las lanzaban contra las piedras. A los hombres les cortaban las manos. A otros los amarraban con paja seca y los quemaban vivos. Y les clavaban una estaca en la boca para que no se oyeran los gritos. Para mantener a los perros amaestrados en matar, traían muchos indios en cadenas y los mordían y los destrozaban y tenían carnicería pública de carne humana... Yo soy testigo de todo esto y de otras maneras de crueldad nunca vistas ni oídas". (Fray Bartolomé de Las Casas, Brevísima Relación de la Destrucción de Las Indias)

    La acción conquistadora y colonizadora de España en Canarias no permitió que ni la cultura, ni la religión, ni la lengua ni la ancestral estructura social que los antiguos pobladores de Tamarant (Gran Canaria) en particular y para el resto de las islas en general -para los guanches- sobrevivieran íntegramente a la colonización de los europeos, una vez Pedro de Vera hubo terminado la invasión y ocupación de la isla en 1483. Como en el resto del Archipiélago las tierras y las aguas usurpadas fueron repartidas entre los mercenarios que participaron en la ocupación y entre quienes financiaron la conquista con la que, por otra parte, no acabaron las pretensiones de otras potencias de la época por hacerse con el control de las mismas, como plataforma logística desde donde controlar el continente, fuente de extracción de oro y esclavos entre otros valiosos recursos naturales, y posteriormente como base de aprovisionamiento de las armadas dirigidas al saqueo y sometimiento de América.

    Concretamente Portugal insistió hasta que se hubo firmado el Tratado de Tordesillas en 1494 mediante el cual las dos potencias se repartían el saqueo de las nuevas tierras "descubiertas" para los embrutecidos europeos.

    Durante la invasión de las islas pulularon recordados siniestros personajes de nefasta memoria, tales como Bethencourt, La Salle, Berneval, Herreras, Bobadilla, Rejón, Vera, Lugo etc., pero quizás el más sanguinario de todos estos fue Pedro de Vera, esclavista y masacrador de pueblos de quienes sus descendientes ideológicos en estas insulas, continúan honrando su criminal memoria dándole el nombre de tan diabólico personaje a calles y plazas de nuestras ciudades, situación sólo comprensible en los pueblos colonizados.

    Se ha especulado mucho en torno a la invasión Española de las islas Canarias, naturalmente vista esta desde la óptica de los vencedores y sus comisarios culturales quienes han mitificando este hecho cruel y sangriento cubriéndolo además de una capa de barniz espiritual y supuestamente evangelizador, nada más lejos de la realidad, ya que durante la guerra los frailes de la iglesia católica cortaron tantas cabezas y esclavizaron a tantos guanches como los propios mercenarios seglares.

    Quizás uno de los planteamientos más objetivos en torno a la invasión de Canarias sea el expuesto por la investigadora española Luisa Isabel Álvarez de Toledo de quien copiamos los siguientes párrafos: "Muerto Enrique IV en diciembre de 1474, Isabel declaró tierra de su conquista las islas de África y Guinea, en agosto de 1475. Al esgrimir la debilidad de Enrique IV, como causa de que el rey de Portugal, se hubiese apoderado del predio, hizo confeccionar albalá, que lo probase. Se conserva entre los papeles de Esteban Pérez Cabitos, en forma de copia autorizada de carta original, "escripta en pergamino de cuero", supuestamente sacada por Herrera, a 6 de marzo de 1470, en oficio de notario jerezano, eclesiástico por más señas. Olvidando el pasado inmediato, el falsario la fechó en Plasencia, a 6 de abril de 1468, cuando el rey estaba privado de autoridad, como prisionero de su hermano, Alfonso XII. Declara que sometido a la "subjestión e gran ynportunidad", de los condes portugueses de Tuguia y Villarreal, cometió la injusticia de darles las islas de Gran Canaria, Tenerife y La Palma, "en las mis mares de España", despojando a Diego de Herrera, al que trata de "noble caballero", sin haber merecido siquiera el "don". Las devolvió con todas las Canarias e islas adyacentes, como a "verdadero señor" de la "Mar Menor, en las partes de Bebería". Complicando la cuestión, el rey metió en danza al Papa, pidiendo el rey que "revoque e anule qualesquier letras e bullas, que en contrario de esta revocación sean", sin caer en que no tocaba pito en el entierro [1].

    No estando "acabada" la conquista, por persistir los canarios en su "rebeldía", los Católicos buscaron capitán experimentado, encontrando a Pedro de Vera, caballero 24 de Jerez y disciplinado. Seguidor de Enrique IV y Juana, estando al servicio de Beltrán de la Cueva y Rodrigo Ponce, cambió de campo con el último, sin un gesto. Suponen los cronistas que Vera fue seleccionado, al encontrarse en las Canarias desterrado, por haber matado a Basurto, alcaide de Medina Sidonia. En verdad, el 4 de febrero de 1480, día en que se extendió el nombramiento, se encontraba en su casa de Jerez. "Acatando como la conquista" de las "Yslas de la Grand Canaria e Tenerife nos pertenesce", para que pudiese llevarla a cabo, sin tropezar con oposición, acumuló los cargos de alcaide de Villa Real de las Palmas, gobernador, capitán mayor y corregidor de Gran Canaria. Pedro de la Algaba [2] o quien la tuviese, le entregaría la fortaleza y los justicias sus varas, siguiendo "ynquisiciones". Descubiertos los culpables de "los escándalos e ruydos e diferencias", que cristalizaron en "divisyones", enfrentando a milites, caballeros y escuderos, los enredadores pararían en la cárcel, siguiendo juicios sumarísimos. Ejecutadas las penas de destierro y muerte, en orden cabildo y milicia, iniciaría la tarea de "sojuzgar" a los naturales de la isla, "a nuestra santa fe católica", "fasta la ganar e vos apoderar" [3], continuando en "Tenerife y la Palma", también en "poder de ynfieles" [4].

    "Tras el fracaso de los intentos anteriores, en 1478 una expedición organizada por los Reyes Católicos desembarca el 24 de junio en la playa de la Isleta al mando de Juan Rejón y del deán Juan Bermúdez y establece un campamento denominado el Real de Las Palmas, junto al barranco de Guiniguada. En sus cercanías tuvo lugar el 28 de junio el primer enfrentamiento bélico con los guanches, donde los canarios sufrieron su primera derrota y se replegaron hacia el interior de la Isla. Sin embargo, pronto surgieron rivalidades entre los invasores Juan Rejón y el verdadero capitán de la conquista el clérigo Juan Bermúdez, lo que originó el nombramiento de Pedro de Algaba como nuevo gobernador y la posterior detención de Rejón, que sería enviado encadenado a Sevilla. Sin embargo, en 1479, Rejón tras verse libre de cargos gracias a las influencias que tenía en la corrupta Corte castellana regresa a Tamarant (Gran Canaria) donde toma la justicia por su mano al decapitar a Algaba. Ante estas circunstancias los Reyes Católicos designan como capitán de conquista a Pedro de Vera y Mendoza que llega a Gran Canaria en 1480."

    Este engendro de los infiernos con apariencia humana conocido como Pedro de Vera y Mendoza, era natural de Jerez de la Frontera, señor del mayorazgo y casa de Vera, en Jerez, alcaide, alférez, alguacil, comendador de Santiago. Conquistador, gobernador y capitán general de las Islas Canarias por designación de los Reyes Católicos (1480-1489), esclavista y masacrador de canarios y gomeros, asesino, salteador de caminos, ladrón y secuestrador.

    Falleció en Jerez en 1498. En esta ciudad había casado con Beatriz de Hinojosa, siendo los padres, entre otros, de:

    A.- Francisco de Vera Hinojosa, caballero de Santiago. En Jerez de la Frontera, de donde era natural, este casó con Teresa Cabeza de Vaca y Figueroa. Padres, entre otros, de: Alvar Núñez Cabeza de Vaca, natural de Jerez. Conquistador de La Florida, segundo adelantado del Río de la Plata (1541-1544). Quien falleció soltero.

    Veamos algunos pormenores de los preparativos para la armada de mercenarios levantada en Sevilla que habrían de acompañar a Pedro de Vera en su aventura en Tamarant, según la Iguala y composición de la capitulación firmada en Toledo en el mes febrero de 1480 por los doctores de Talavera, Villalón, y Lillo del Consejo, quienes firmaron en nombre de los reyes Isabel y Fernando con Alonso Quintanilla, contador mayor de cuentas del Consejo, y Pedro Fernández, capitán de la mar, sobre la armada que éstos preparan para Gran Canaria. El acuerdo mantiene los términos del memorial ya existente, fechado en Toledo el 24 de febrero de 1480, salvo en los 100.000 maravedis consignados para que un mercader llevase ropa y otras cosas menudas; éstos términos son: 200.000 maravedias de trigo y cebada, 250.000 maravedis del flete de los navíos de Pedro Fernández y de otros que se han de mandar, 36.000 maravedis para el capitán Pedro de Vera, 48.000 maravedis como sueldo de los veinte caballeros, 120.000 como sueldo de los cien vasallos de monte y 20.000 maravedis de los gastos hechos por Juan Rejón; estas sumas más las que irán apareciendo antes de la partida hacen 900.000 maravedis, de los que Alonso de Quintanilla pone 300.000 y Pedro Fernández 600.000, ofreciéndose a Pedro de Vera participar con la mitad de la parte correspondiente a Pedro Fernández, debiendo proveer los beneficiarios las gentes y navíos necesarios en un plazo de 10 años. Se concede que durante 10 años ni el Almirante ni sus lugartenientes lleven derecho algunos sobre las pesquerías y presas hechas en Gran Canaria, renunciando los reyes a los quintos sobre cueros, sebo, esclavos y armazón y sobre las presas hechas en las islas de infieles, salvo en la Mina de Oro, y comprometiéndose a impedir que Diego de Herrera haga presas en Gran Canaria y que concierte paces en Tenerife y La Palma. Como fácilmente se puede deducir, esta no fue una armada netamente "evangelizadora".

    El 3 de febrero de 1480 el Consejo de Castilla había emitido orden al Almirante mayor de la mar y al guarda mayor de la saca del pan de la ciudad de Jerez de la Frontera y sus lugartenientes, así como a los del Puerto de Santa María y demás villas del señorío del arzobispado de Sevilla y del obispado de Cádiz, para que permitan al alcaide Pedro de Vera, veinticuatro de Jerez, o a quien su poder tuviere, sacar doscientos cahices de trigo y doscientos de cebada para la gente que va o está ya en la conquista de Gran Canaria y otros treinta cahices de trigo para y veinte de cebada para una fortaleza [el nombre está en blanco], bajo juramento de emplearlo para tal fin. Se ordena que dicha saca tenga prioridad sobre cualquier otra acordada. Con fecha 4 del mismo mes y año, el Consejo emite otra orden dirigida al consejo y vecinos de Sevilla para que levanten en la ciudad y su término cien ballesteros de monte que han de unirse a la gente de Pedro de Vera, gobernador y capitán de Gran Canaria, llevará a la conquista de dicha isla; los menci0onados ballesteros deberían presentarse con sus ballestas y almacén, y para su alimentación durante la campaña se les concede que tengan parte en las presas que consigan hacer en la isla, es decir, podían entrar a saco en la isla. Por esa misma fecha, los reyes católicos que eran pródigos concediendo prebendas siempre que éstas no les costasen dinero, estuvieron muy generoso con el nuevo capitán, especialmente cuando regalaban lo que no les pertenecía, así, mediante Real Cédula conceden a Pedro de Vera la gobernación y capitanía de la isla de Tamarant, "así por tierra como por mar" cuya conquista junto a la de Tenerife decían pertenecer al rey, y de la alcaldía de la fortaleza de la villa real de Las Palmas, recibiendo así mismo el cargo de corregidor, con autoridad para poder disponer de los distintos oficios. Por esta misma carta se ordena a Pedro de La Algaba, alcaide de dicha fortaleza, que entregue ésta al nuevo gobernador y se otorga a éste poder cumplido para que resuelva las diferencias entre los mercenarios de la invasión. En igual fecha por otro documento se autoriza Pedro de Vera, "como gobernador y capitán" de las islas de Canaria para repartir a las personas que vivan o quieran ir a vivir a Gran Canaria, los ejidos, dehesas y heredamientos de dicha isla, según lo que por sus méritos o estado hubieren menester, y para nombrar los oficios necesarios, ya sean anuales o vitalicios.

    Como ejemplo de la corrupción que reinaba entre los altos funcionarios de la corte española, vemos como por un documento extendido por el Consejo de Castilla fechado en Toledo a 4 de febrero de 1480 se concede a un personaje cuyo nombre no figura en dicho documento "Notaría y escribanía de cámara en todos los lugares del reino y en las islas de Gran Canaria y Tenerife, y se ordena a las justicias del reino, y en especial a las de dichas islas, que se le guarden todos sus derechos", no deja de ser curioso que concedieran una Notaría en la isla de Chinet (Tenerife) doce años antes de ser invadida.

    Es sobradamente conocido el interés que mostró la reina católica por dar un buen uso a los criminales convictos utilizándolos como elementos civilizadores y evangelizadores de las islas invadidas, tal como quedó recogido en un poder real expedido en Medina del Campo con fecha 10 de diciembre de 1480 a nombre de Juan de Torres, corregidor de las villas, valles y merindades de Trasmiera, Peña Melera, Valdebeseros, Peña Samago, Peña Rubia y val de los Herreros, para que en nombre de sus Altezas pueda "Prometer palabra y seguridad de perdón a los delincuentes de su jurisdicción y del marquesado de Santillana y tierras del conde de Castañeda, salvo los reos de traición, delito de falsa moneda, falsedad hecha en nombre de los reyes y saca de monedas de oro o plata, que fueran a servir a su costa en la conquista de Gran Canaria por especio de seis meses, contados desde el día en que se presentaren a Pedro de Vera, capitán y gobernador de dicha isla, y de Miguel de Moxica receptor de la misma. Se ordena a las justicias que no actúen contra las personas y bienes de quienes muestren la concordia hecha con Juan de Torres y fe de Pedro de Vera y Miguel de Moxica de haberla cumplido, pudiendo exigir únicamente la restitución de los bienes que hubieren tomado; y se ordena al chanciller y a los notarios que les libren cartas y sobre cartas de perdón que necesitasen, con obligación de ser perdonados por las justicias."

    Hemos dicho más arriba que Pedro de Vera era un ladrón y secuestrador, y que andaba a sus anchas posiblemente escudado en los servicios que como mercenario había prestado a la monarquía española en las guerras mantenidas en tierras italianas. El código entre ladrones no ve bien el que unos ladrones sean robados por otros, y cuando esto sucede y no pueden tomar la revancha por su mano suelen acudir a la justicia como honestos ciudadanos agraviados, esto debió sucederle a Pedro de Vera con su expoliado y secuestrado Pedro de Vargas, según se desprende de un Documento del Registro General del Sello extractado por don Eduardo Aznar Vallejo y cuyo texto es el siguiente: " 1484 Agosto 20. Córdoba. Receptoría para que las justicias de Sevilla y Jerez de la Frontera y las del arzobispado de Sevilla y el obispado de Cádiz reciban los testimonios de los testigos presentados por Pedro de Vargas, alcaide de Gibraltar, los hijos de Bartolomé de Basurto. ya difunto, y Leonor Núñez, hija de Frey Alonso de Vadespino y de Leonor Núñez, hija del citado Bartolomé de Basurto, en el pleito que siguen ante el Consejo con Pedro de Vera, gobernador de las islas de Canaria, que acusa a Bartolomé de Basurto y Pedro de Vargas de haberle tomado del lugar de Marchinilla, término de Jimena,-villa de la que era alcaide-, en marzo de 1470 cierto número de puercos, bueyes y yeguas, más una recua de asnos cargados de trigo y vino, que tomó Martín Jiménez, alguacil de Medina Sidonia, por orden de Pedro de Vargas, y en julio de dicho año doscientos de trigo y cebada y las ropas de sus pastores, cantidades que les reclama, junto al valor de los partos y postpartos, sumando todo un cuento y ochocientos mil maravedís. Contra demanda García de Medina, procurador de Pedro de Vargas, presentó una información, alegando que sus defendidos habían actuado en caso lícito, que dichos bienes no eran de Pedro de Vera y que en caso de haber tomado algo de su propiedad, éste no podía reclamar por haberse obligado al duque don Juan, padre de don Enrique, duque de Medina Sidonia, a no hacerlo, y acusando a Pedro de Vera y a sus escuderos de haber prendido hace seis años a Pedro de Vargas, cuando se dirigía a la posada de Juan de Luna, por el camino de Asperilla, entre Gibraltar y Sevilla, dando muerte a Andrés de Sanabria y Juan de Grajales y tomando ciertos bienes de Pedro de Vargas y de sus criados Juan de Acenes y Andrés Martínez, bienes qué ha de restituirle junto a los cuatrocientos mil maravedís del rescate .El Consejo concede a ambas partes un plazo de setenta días para presentar sus pruebas. Alfonsus. Antonius. Andréas. Luis del Castillo".

    Es manifiesto el interés mostrado por los historiadores oficiales y oficialistas en ocultar o minimizar el hecho de la captura y esclavización de los guanches y su posterior venta en los mercados de Valencia, Sevilla, Barcelona y Mallorca, como principal fuente de ingresos económicos para sustentar los gastos de la invasión, tanto de la corona española como de los mercenarios que participaron en la invasión y saqueo de las islas. Esta práctica fue mantenida en las islas desde Bethencourt hasta Alonso de Lugo, y a la que no fue ajena la iglesia católica quien también se benefició económicamente de esta inhumana actividad, aunque en algún momento determinados obispos protestaron ante la corono española por la venta de estos desgraciados, no lo hicieron tanto por el inhumano comercio en sí, sino por una cuestión de jurisdicción, cuestión esta en la que la iglesia siempre ha sido muy celosa, y por otra parte, suponía una pérdida de ingresos seguros pues los guanches supuestamente cristianizados pagaban los diezmos a la iglesia, lo que en el fondo suponía una especie de seguro ante los demás depredadores. Veamos algunos ejemplos de la venta de esclavos gomeros guanches por parte de Pedro de Vera de los que sobrevivieron a la masacre llevada a cabo por éste en la Gomera, con motivo del ajusticiamiento del verdugo Herrera, tema que por su amplitud y profundidad trataremos en otro artículo.

    * Miembro de la Asociación Sociocultural Kebehi Benchomo.

    Bibliografía:

    Luisa Isabel Álvarez de Toledo, Duquesa de Medinasidonia)

    África versus América

    NOTAS:

    (1) Información de Esteban Pérez Cabitos; Biblioteca de El Escorial. R.A. IV.

    (2) Pedro de la Algaba y Juan Rejón Vivían en 1480.

    (3) SRGS. II. 1480. I

    (4) SRGS. V. 1486. 194

    ResponderEliminar
  2. LA EXPLOTACIÓN CAPITALISTA,
    AYER COMO HOY

    Eduardo Pedro García Rodríguez*

    Canarias es producto del choque violento de dos culturas; es decir, la colonia Canaria nace a partir de la invasión española. Antes de eso lo que existía era el pueblo Mazigio, la sociedad guanche, que fue una suerte de culminación de la civilización generada a lo largo de siglos, por los primeros pobladores de nuestro territorio. Estrictamente hablando, Canarias ya es un producto del cruce de varias etnias aunque perdura mayoritariamente la Guanche-Mazigia (entendida en sentido étnico), ubicado totalmente en la etapa colonial de nuestra historia que se extiende hasta el presente, en que sufrimos la dominación colonial del capital imperialista.

    Pero esto, que eufemísticamente se ha venido a llamar "encuentro de dos culturas", no fue sino una contradicción muy violenta que abrió un abismo de diferencias sociales, culturales, raciales, ideológicas y políticas, que hasta hoy no se subsanan. De nada ha servido la supuesta autonomía para superar este abismo; por el contrario, la miserable actuación de las clases explotadoras durante todo el período transcurrido, ha profundizado la brecha. Nuestra raquítica burguesía, que hasta hoy no puede constituirse en clase dirigente, no logró cumplir una tarea que dio autoridad a las burguesías de otros países: plasmar un Estado nacional y la nación Canaria, claro está. Ante la incapacidad histórica de la burguesía, esta tarea debe pasar a manos de los trabajadores de los profesionales libres, de los pequeños y medianos empresarios, es decir, a manos del pueblo que, al fin y al cabo, es la base de toda nación.

    Para que exista la Nación Canaria, es menester un territorio, una fluida trama económica que le de base y la articule internamente, una personalidad cultural definida y una tradición histórica. Como puede verse, sólo algunos de estos aspectos existen actualmente, pero ni la base económica articulada, ni el definido perfil cultural, existen. Este es el problema por resolver y viene desde la conquista, del mismo modo que desde la invasión española data la dominación colonial del Archipiélago.

    Canarias existe como nación sólo en la medida que todo el conjunto de personas que vivimos en este espacio territorial, hemos pasado el mismo conjunto de experiencias históricas durante siglos. O sea, los que vivimos aquí, los gomeros, palmero, herreños, conejeros, majoreros, canarios, tinerfeños, hemos sido no sólo testigos sino partícipes de un proceso histórico común; consecuentemente, somos parte de una experiencia histórica de carácter nacional, que es algo de lo que nosotros no podemos prescindir. Eso está total y absolutamente presente en nuestra existencia. Entonces, somos nación. Esto es definitivamente claro, pero como país somos fluctuantes en función de los intereses del capital imperialista.

    La cultura Canaria, lo mismo que para los demás pueblos del mundo, significa una población en relación con condiciones materiales dadas, en donde la relación hombre-medio determina una manera específica de ser. Es lo que los antropólogos llaman cultura.

    En 1402, cuando llegaron los normandos y españoles, aquí estábamos en la primera sociedad de clases, mientras que en Europa ya se estaba avanzando del feudalismo al capitalismo.

    Los estudios realizados muestran que aquí se dio un desarrollo singular, ya que la nueva sociedad impuesta tuvo que enfrentar condiciones materiales diferentes. Fue necesario resolver la creación de un conjunto de instrumentos de producción altamente especializados para la producción azucarera, los que no eran necesarios en Europa, para poder, a partir de estos instrumentos de producción especializados, someter el medio a las necesidades capitalistas.

    Esta es una diferencia con España o con otros países, en donde la reproducción de la sociedad humana, que es una de las primeras tareas que cubre la sociedad, podía realizarse a través de la explotación de los medios materiales de existencia enteramente formados; de agricultura adaptada a las condiciones del medio, sin grandes especializaciones, sin la necesidad de crear instrumentos muy complejos.

    Por el contrario, la explotación intensiva requerían la creación de instrumentos muy complejos; porque difícil es también la orografía. Lo que ocurre es que en Europa esas condiciones difíciles de la orografía se pueden resolver con mínimas transformaciones del medio; en cambio, aquí, era absolutamente indispensable, vamos a decir artificial, elevar el medio, para poder lograr los niveles de asistencia básicos. Esto permitió que el desarrollo de las fuerzas productivas, desde muy pronto, adquiriera un grado muy complejo; era necesaria una población esclava para dominar estas condiciones. Al mismo tiempo, estas condiciones requerían instrumentos de producción muy complejos y esta relación, entre medios e instrumentos sofisticados, hicieron que las fuerzas productivas aquí se desarrollaran de manera diferente y mucho más compleja; lograron un mayor desarrollo que en otras partes.

    Es decir, nuestra historia específica no tiene las mismas condiciones y características que las que tuvo Europa, o las tuvo China. Como modo de producción en su conjunto sí, pero como formas específicas de desarrollo histórico, no. Dentro de estas condiciones, nosotros estábamos en un nivel de desarrollo clasista inicial pero muy avanzado, a tal punto, que cuando llegaron los españoles se estaba dando un proceso de descomposición, de disolución de la formación clasista inicial y en el paso hacia una formación de tipo, llamémosle, feudal, en donde los medios de producción, fundamentalmente la tierra, comenzaban a ser propiedad privada; en donde la tierra se convertía en el medio de producción fundamental y en donde la fuerza de trabajo comenzaba a dejar de ser el factor determinante del proceso productivo.

    Una de las falacias sostenidas por el colonialismo es aquello de que porque no teníamos instrumentos de hierro éramos inferiores; que porque teníamos instrumentos de madera piedra o hueso, éramos inferiores y que ellos tenían instrumentos de hierro y que por eso tenían un nivel cultural superior.

    Esto es falso, total y absolutamente falso. A nosotros el hierro no nos ha servido absolutamente de otra cosa más que de deterioro de nuestras condiciones materiales de existencia. Si nosotros, por exigencias de nuestro propio desarrollo, de nuestro medio ambiente, hubiéramos elaborado eso, sería totalmente válido, porque el hierro le sirve al agricultor para romper tierras muy duras, sirve para cortar árboles de bosques muy fríos; nosotros no teníamos necesidad de eso. Desde luego que el hierro nos sirve, pero nosotros estábamos desarrollando toda una cultura propia sin necesidad del hierro, por una simplísima razón: las condiciones materiales nuestras eran diferentes a las del viejo mundo europeo.

    Nuestra edad de los metales, que en el caso de Europa representó el período de paso a la ciudad, de paso a la civilización, etc., nosotros la hicimos con otro tipo de instrumentos que ellos no tuvieron. Con gentes que calendarizaron al milímetro los procesos de producción. Con gentes que lograron desarrollar técnicas complejísimas de manejo de los pastos el agua y de la tierra.

    Con gentes que lograron desarrollar técnicas del manejo de la tierra, de transformación de la tierra, cosa que para los europeos es un descubrimiento del medioevo y de períodos posteriores. Su paso a la civilización se dio gracias al hierro porque las condiciones específicas lo exigían. Nuestro paso a la civilización es gracias al manejo del agua, por ejemplo. Son condiciones distintas de desarrollo. Nuestras formaciones sociales, nuestros modos de producción, obedecen a leyes generales; a las mismas leyes, pero, en lo particular, nuestras diferencias son cualitativamente diferentes.

    Ninguno de los pueblos nuestros estuvo en la prehistoria cuando llegaron los europeos. En el caso nuestro la situación es muy singular, es algo importante de entender. Cuando llegaron aquí los europeos, todas las Islas habían logrado niveles altísimos de sometimiento del medio a las necesidades humanas; es decir, habían logrado que las fuerzas productivas alcancen un nivel de desarrollo superior al de la subsistencia y en condiciones en las cuales estaba en avance, en ascenso, hacia modos de producción similares a los que se daban en otras partes del mundo. Ello hizo posible que los guanches mantuviesen contactos comerciales desde las Islas aún no invadidas con los europeos, al margen de los actos de piratería y saqueo a que éstos estaban habituados.

    El hecho de que en las Islas, por ejemplo, no se hubiesen logrado desarrollar civilizaciones como la China o cualquier otra civilización similar: la India, la Maya o la Andina, no significa que los guanches hayan estado en el período neolítico europeo; (afirmación ésta arteramente sostenida por los colonizadores) nosotros estábamos como hemos dicho en un periodo pre-clasista, pero ese período pre-clasista no ha podido ser superado en pleno desarrollo capitalista. Incluso, lo único que ha logrado el capitalismo colonial con ese desarrollo, que ya el pueblo canario había logrado sobre la base de su propia experiencia, es deteriorarlos más y convertirlos en la cola de un proceso que no tiene nada que ver con los canarios. Los canarios estábamos mucho más avanzados que los colonialistas en el aprovechamiento de nuestro medio ambiente. Nuestra capacidad de explotar los bosques, nuestra capacidad de someter las condiciones dificilísimas del medio ambiente, había logrado un optimo desarrollo. Estábamos en pleno proceso de desarrollo. Cuando llegó Occidente, el capitalismo colonial en su conjunto asumió la tarea de absorber todo esto para su propio desarrollo, y lo único que logró fue bajar a niveles previos a los que tenía la población guanche y deteriorar totalmente las posibilidades de un desarrollo adecuado. Eso significa que no estábamos en la prehistoria, en el sentido europeo. En Europa se asume como tesis válida que nuestro pueblo estaba en uno de los escalones de la evolución que ellos tuvieron. No. Nosotros estábamos en uno de los escalones de la evolución que nosotros tuvimos, que es diferente a la evolución que ellos tuvieron, y que teníamos cosas paralelas, en términos de producción, pero con nuestras propias singularidades.

    Europa cuando nos invadió en el siglo XV, era un territorio, especialmente España, que por esas fechas estaban saliendo del feudalismo, y el feudalismo fue lo que permitió el gran desarrollo económico europeo a costa del saqueo y exterminio de otros pueblos. No olvidemos que fueron banqueros y mercaderes judíos, genoveses y catalanes quienes financiaron la invasión y conquista y saqueo de nuestra nación.

    Ahora bien, para poder explotar con cierta tranquilidad por parte de los invasores al país dominado, primero debe cambiar, por todos los medios a su alcance, los fundamentos sociales y morales que sustenta la población invadida, al fin de que asuma los presupuestos económicos, morales y religiosos de los invasores. Así los invasores someten a los invadidos a un proceso de desenraizamiento, conocido como culturización. Muy similar a los lavados de cerebros que los ejércitos aplican en el entrenamiento de sus soldados, anulando drásticamente en éstos, mediante la humillación continuada, la personalidad de los individuos, incrustando en sus cerebros solamente parámetros de obediencia ciega, anulándoles cualquier posibilidad de hacer uso de criterios propios.

    En el caso de los pueblos invadidos, está función de alienación mental de la sociedad sometida está encomendada a la religión, en nuestro caso a la iglesia católica, quien ha venido prestando eficazmente su labor hasta nuestros días, en que poco a poco ha sido sustituida en esta misión alienadora por los denominados medios sociales de comunicación, dirigidos desde la metrópolis.

    En nuestro caso, la iglesia católica actuó inteligentemente, al encontrarse con unas prácticas morales, religiosas y espirituales muy superiores a las que portaba el etnocentrismo europeo, y, al no poder erradicar totalmente del pueblo sometido sus ancestrales creencias, a pesar de los crueles y sanguinarios métodos empleados por los conquistadores en sus intentos de erradicación de las prácticas religiosas de la sociedad guanche, optaron por aceptar y sincretizar la mayoría de ellas, convirtiendo a la Diosa-Madre en la Virgen María, del Pino, de Candelaria, de Las Nieves etc., sustituyendo con estas advocaciones católicas a la Diosa Tanit, Tara, Chaxiraxi, Abora, Moneiba, Magek, de la Luz, Celeste etc., sustituyendo, así mismo, a los dioses o espíritus mediadores por santos católicos.

    Con esta situación los colonizadores han conseguido crear en la población canaria un trauma en nuestra identidad, un complejo de inferioridad que cargamos sobre nuestra espalda; un complejo de inferioridad y servilismo que pesa sobre nuestra espalda desde 1402.

    Incentivada desde el siglo XIX, gran parte de nuestras culpas contemporáneas son del siglo XIX a esta parte. Hasta 1900 había república de Magos, era una categoría social definida y era racial, étnica, más que otra cosa. Era una cosa muy definida. Magos y caciques colonizadores.

    Estaba clarísimo. Los colonizadores eran de España en particular y de Europa en general; criollos, los hijos de aquellos que vivían aquí. En ningún momento tenía el Mago problema en llamarse canario, para él no era un problema. Y nadie en ese momento tenía ese problema de identidad. El grave problema de desidentificación nuestro está asociado al desarrollo del capitalismo en su fase imperialista, tras la segunda invasión masiva del continente africano por Europa.

    En el mundo canario, el problema de identidad comienza a finales del siglo XIX, con la fase del desarrollo pleno del imperialismo, y se agrava drásticamente a partir de los años sesenta del siglo XX, con la llegada de grandes contingentes de españoles, al amparo del desarrollo del turismo masivo en nuestras islas. Contingentes que no sólo han aumentado en los últimos tiempos, sino que, además, tenemos que absorber el excedente de mano de obra de Europa, además de la población no deseable de aquel continente. El racismo como tal, en su forma contemporánea, brutal, es un producto del desarrollo capitalista. O sea, del desarrollo capitalista en su fase colonial-imperialista, que es la que nosotros tenemos desde el siglo XV, y el problema de la identidad nacional impuesta es producto de eso.

    A nosotros nos hacen avergonzarnos (después de habernos extirpado nuestra lengua madre) por no hablar castellano con el acento y dicción de Castilla. Nosotros quisiéramos apellidarnos en castellano, catalán, vasco, gallego, o portugués, francés, inglés o alemán; ya nuestros apellidos guanches o canarios en general, nos resultan insuficientes. Se nos hace pasar por la humillación de que, para que nuestros profesionales del periodismo puedan tener acceso a puestos de locutores o presentadores de los medios de comunicación sociales de España en Canarias, tengan que pasar por unos vergonzantes cursos de dicción castellana.

    Un apellido en inglés o en alemán es para algunos jilufos un apellido elegante. Para algunos un apellido español es como si fuese descendiente de conquistadores o colonizadores (en la mayoría de los casos el sujeto desconoce la causa porque portan esos apellidos europeos). El portar apellido guanche o canario nos han hecho creer que es más vergonzoso. Y eso es un problema de identidad que nace con el desarrollo imperialista del capitalismo colonial, que somete a las conciencias a una crítica interna sobre sus valores, que no existía antes. Esto es una de las cosas que nosotros necesitamos que la gente tenga muy claro, porque nuestra lucha no está solamente en tratar de recuperar nuestros valores guanches en contra de la supuesta multiplicidad étnica y cultural cosmopolita. Se trata de recuperar nuestros valores canarios africanos frente a la alienación que en este momento supone el peso del desarrollo imperialista sobre nuestros hombros.

    Canarias, como hemos dicho, es un país mestizo. Todos los países del mundo son mestizos. Lo que ocurre es que aquí escondemos con el nombre de mestizo una posición tercerista con relación a lo que representó nuestra historia. Nos cuesta mucho reconocernos indígenas. Ser guanche en Canarias es un estigma; En consecuencia, la gente prefiere llamarse descendiente de conquistadores o colonizadores. En este país, tan "cosmopolita", decirse guanche es no sólo una blasfemia, es algo más grave que eso. Entonces, mestizo es el tercerismo formidable porque entonces así uno no se reconoce como guanche, que para algunos huele mal, ni se tiene que reconocer como europeo, que cae mal. Entonces, con lo de mestizo, uno resuelve todo. Es la posición tercera, claro, es la que está al medio: ni con los unos, ni con los otros. Así, uno se salva de tener que decir que es indígena, en este país, donde una buena parte de la población sufre del síndrome del colonizador, y la otra parte el síndrome del colonizado. Y por encima de éstas, están los criollos explotadores al servicio de los colonizadores capitalistas.

    benchomo@terra.es

    *Secretaría de Documentación y Prensa de A.P.I.F.D.I.C.

    Ciudad colonial de Eguerew, mayo de 2004.

    Fuentes: http://www.conocimientosweb.net/mestizos/article31.html

    ¿Quiénes somos los mazigios canarios?

    ¡¡CANARIAS PARA LOS CANARIOS!!

    ResponderEliminar
  3. EL MISMO PERRO CON DISTINTO COLLAR

    Eduardo Pedro García Rodríguez*

    No se aplaque el rencor, ni el odio muera
    ante el pendón que el bárbaro enarbola,
    si un día la justicia estuvo sola
    lo sentirá la humanidad entera
    Ruben Darío.

    La inmensa mayoría de los canarios descendemos
    -nos guste o no- de Guanches.

    Muchos de los alimentos principales que ingerimos, y cantidad de palabras que hemos incorporado a nuestro idioma, tienen origen precolonial. Las más sanas y bellas costumbres y leyendas que tenemos las debemos a nuestros antepasados los guanches. Y si pudiéramos comprender y amar nuestros orígenes estaríamos orgullosos de provenir de tan noble estirpe.

    En nuestro país hay hombres de conocimiento, depositarios, como tantos venerables ancianos guanches que se encuentran diseminados aún a lo largo y ancho de toda Canarias, de antiguas tradiciones y secretos que se gestaron y transmitieron en esta bendita tierra que ellos han habitado desde hace miles de años; herederos de profundos conocimientos de la medicina, de la naturaleza y de lo sobrenatural, y, sobre todo, vivos exponentes de una espiritualidad verdadera que siempre han transmitido, con amor desbordante, a quienes les respetan y abren su mente y su corazón permitiendo que esa sabiduría e influjo espiritual penetre en nosotros.

    Al oír y leer algunos pobres comentarios, que siempre se afanan en tratar al guanche de ignorante, me ha parecido escuchar la voz de los ancestros que gritan, no sin ironía, ni sin tristeza: "Han pretendido negar a nuestra Diosa; han llamado demonios a nuestros espíritus intermediarios; han querido borrar nuestra historia; han menospreciado nuestro arte rupestre maravilloso; se han burlado de nuestra ejemplar mitología; no han podido comprender la fuerza de nuestros ritos ni la grandeza de nuestro espíritu. Pero ¿podrán además seguir llamándonos impunemente ignorantes, y hasta negar nuestra existencia? Pero la propia presencia de estos sabios me ha dado la respuesta: "No. Aquí estamos; somos los verdaderos habitantes de esta tierra; desde siempre hemos pertenecido a ella; observamos con estupor cómo la han mancillado destruyéndola y contaminándola; somos nosotros quienes nos preocupamos por nuestra Madre: la cuidamos, sufrimos sus sufrimientos, la amamos".

    Aún hoy en día, quienes se creen descendientes de aquellos bárbaros conquistadores y despiadados colonos, y que continúan gobernando a su antojo esta colonia haciendo gala de un total desprecio hacia un pueblo como el canario al que pretenden continuar manteniendo espiritualmente en una ancestral ignorancia, son reacios a renunciar a una de sus más estimadas tradiciones, el paseo público en grotesca procesión de un supuesto pendón de la fundación de la ciudad, en este caso concreto, de la supuesta fundación de la ciudad de La Laguna (Eguerew), y decimos supuesta fundación porque como hemos venido sosteniendo hasta la saciedad, no se puede fundar lo que con anterioridad estaba fundado.

    En la comarca de la Jardina y más concretamente en Eguerew (La Laguna) existían núcleos de población guanche establecidos en el Brunku (Bronco), Sejeita (San Roque), Gallardina (en la Vega), Jardina (las Mercedes), y en los llanos de Chicayca (Los Rodeos). En este lugar existía un templo guanche que después de haber escapado a la acción depredadora de los colonizadores durante casi quinientos años, finalmente fue destruido por una pala mecánica con motivo de la ampliación de la pista de rodadura del aeropuerto. Por tanto, afirmamos que es una falacia hablar de fundación cuando lo que realmente se produjo fue el asentamiento estable de los colonizadores europeos en el lugar, desplazando a los primitivos habitantes guanches de la zona e incluso aprovechándose de un poblado de modestas chozas en las que éstos habitaban cerca de una fuente en el lugar que después sería conocido como Lomo de la Concepción. Insistimos, la supuesta fundación de la ciudad de La Laguna, es otra de las tantas falacias históricas creadas y sostenidas por los colonizadores, tanto los del pasado como los del presente.



    Fuentes consultadas:
    Fernando Trejo.
    Guaire Adarguma.
    Secretaría de Documentación y Prensa de A.P.I.F.D.I.C.

    Ciudad colonial de Eguerew, julio de 2004.

    ¡¡CANARIAS PARA LOS CANARIOS!!

    ResponderEliminar
  4. UNA HISTORIA RESUMIDA DE CANARIAS



    PERIODO COLONIAL 1501-1600

    DÉCADA 1501-1510



    CAPITULO VI (I)



    Guayre Adarguma *





    1505. Es nombrado Gobernador de esta parte de la colonia Bartolomé Benítez. Sobrino de Alonso de Lugo. Establece el futuro Adelantado sisas sobre los comestibles para conducir aguas de Tahodio á la Laguna mediante permiso del personero Juan de Armas.



    A su ahijada Elvira Hernández hija del ex mencey de Abona y hermana del infante Pedro Bueno da tierras en el mismo Abona. Por repartos mal hechos del botín de guerra corre el disgusto entre los principales invasores conquistadores y nobleza indígena así como también por las expediciones a la captura de esclavos al continente lo que motiva quejas que elevadas á los Reyes dieron lugar á una Real Cédula de la Reina Doña Juana “la loca” en que se puso coto á los manejos del Adelantado.



    1505. A principios de ese año salía de España Lope de Sosa, nombrado sucesor de Escudero como gobernador colonial de Tamaránt (Gran Canaria) con encargo especial de vigilar la contratación de Berbería, de la Torre de Santa Cruz y de la Mar Pequeña, factorías que continuaba mirando el gobierno de la metrópoli con singular predilección.



    Pero mientras esto sucedía, es digno de notarse que, teniendo Gran Canaria su gobernador especial y ejerciendo un dominio absoluto sobre Tenerife y La Palma el Adelantado Alonso de Lugo, resolviera el rey enviar a las tres islas realengas un nuevo juez pesquisidor encargado exclusivamente de poner remedio a los envejecidos abusos y arbitrariedades de que seguían quejándose los colonos y le informara con criterio imparcial del estado económico, social y político de aquellas nacientes poblaciones coloniales.



    1505. Se nombró por parte de la metrópoli un inquisidor para canarias, el licenciado Bartolomé López Tribaldos, que tendría su sede en Winiwuada (Las Palmas) y dependería del Tribunal de Sevilla. Situación ésta que continuaría hasta 1567, año en que se creó en la colonia canaria un tribunal autónomo. En esta primera época la actividad y rigor del inquisidor no fueron grandes.



    El segundo inquisidor será el bachiller Martín Ximénez, chantre de la Catedral de canarias y también provisor espiscopal, quien llegó a las islas en 1524. A diferencia de los tiempos anteriores, su actuación fue muy enérgica y arremetió contra amancebados, hechiceras y falsos conversos, prendiendo y castigando a muchos. Contra él se levantó un poderoso frente de oposición, formado por el gobernador, varios regidores y canónigos, mercaderes y, en general, por el numeroso y bien situado grupo de los conversos. Fue un serio intento por lograr la supresión de la Inquisición, o al menos la destitución de Ximénez y la vuelta a la situación anterior. Pero el inquisidor se impuso.



    1505. Se establecen en el lugar de Garachico en la isla Chinech (Tenerife) los colonos Pedro de Ponte y Ana de Vergara, dando así lugar al posterior establecimiento de población europea en el lugar.



    Primero se llamó Aldea de San Pedro de Daute, conociéndosele con el nombre de Playa de San Pedro o del Genovés, y no tardó en desarrollarse debido a la bondad y comodidad de su puerto. Su nombre actual parece que procede de la palabra guanche gara que significa islote, a la que los españoles agregaron el término de chico. Está situado en la costa Norte de la isla hacia el Oeste, en el fondo de una rada bastante extensa y sobre una escarpada roca redonda y llena de grietas. Frente a la población y cerca de la costa se levanta un peñasco acantilado que deja entre él y la isla principal un canal navegable que se denomina Roques, y al Este hay una pequeña ensenada donde no es fácil desembarcar. Antes de la erupción de 1706 (montaña Bermeja) el puerto era muy concurrido por buques de América y Europa, pero aquella cegó parte de él, así como incendió la aldea de Morales y parte de Garachico, causando considerables daños.



    Garachico se dividía con Añazu n Chinech (Santa Cruz de Tenerife) el comercio exterior de la isla, pues por el primero se exportaban los productos naturales de la isla desde los Realejos hacia noroeste y por el segundo tenían salida los de la Orotava hacia el nordeste; sin embargo, mientras Santa Cruz era un modesto lugar de 200 casas habitadas por pescadores y mareantes, Garachico era una ciudad opulenta con más de 400 edificios poblada por ricos mercaderes.



    1505. Los reyes castellanos instituyeron un tribunal supremo de apelaciones unas veces con el nombre de Audiencia y otras con el de Chancillería, y que en 1505 se trasladó a Granada. Las audiencias de Galicia, y las de las colonia de Santo Domingo y Canarias, que fueron apareciendo sucesivamente, tenían competencias más limitadas que las chancillerías y en los asuntos de mayor cuantía debían inhibirse en beneficio de estas últimas. La Audiencia de la colonia canaria tendría como tribunal superior a la Chancillería de Granada, y desde 1566 a la Real Audiencia de los Grados de Sevilla, excepto en los pleitos de hidalguía.



    1505. En este año el joven Guillen, conde de La Gomera, cumplió 14 años de edad, hijo del ajusticiado Hernán Peraza, y la ninfomona Beatriz de Bobadilla la cual al casarse en segundas nupcias con el Adelantado Alonso de Lugo, tenía dos hijos de su primer marido, llamados Guillén e Inés, quienes después de la muerte de su madre en la corte castellana – según recogen algunos historiadores envenenada por orden de Isabel la Católica-, solicitaron y obtuvieron por tutor a su padrastro Alonso de Lugo.



    Guillén, habiendo cumplido sus 14 años se emancipó de aquella tutela y entró en la libre posesión de sus estados, tomando el título de conde de La Gomera, mientras su hermana Inés casaba con Pedro de Lugo, hijo segundo del Adelantado y heredero de todos los honores y mayorazgos de su casa, por muerte de su hermano Fernando.



    “No podía don Guillén con su título, rango y pretensiones nobiliarias permanecer mucho tiempo oscurecido en aquella pequeña isla apartada de todo trato social, habitada por gente ruda y de limitado horizonte, y así por ello a nadie pareció extraño que hiciera un viaje a Gran Canaria, a donde le llamaban arreglos y litigios con su tutor, cobranza de rentas y cuestiones sobre diezmos de orchilla con el Cabildo y su obispo.



    Esperábale en Las Palmas una aventura singular, propia de su juventud, audacia y herencia genética, pues de “casta le viene al galgo”. Vivía en aquella ciudad una doncella hermosa y deuda suya, llamada doña Beatriz Fernández de Saavedra, cuya historia secreta se contaba de este modo.



    Entre las personas principales que siguieron a doña Inés Peraza en su primer viaje a Lanzarote se distinguía su primo, Luís González Martel de Tapia, a quien nombró gobernador de la isla del Hierro. Casóse allí con una bellísima bimbache y de esta unión nació Rutina de Tapia, tan bella como su madre. Andando el tiempo esta joven casó a su vez con Diego de Cabrera, gobernador de Lanzarote, y por segunda vez en Canaria con

    el portugués Manuel de la Noroña, hermano de Simón González de la Cámara, gobernador de La Madera. Tratando de volver al Hierro y esperar allí órdenes de su último marido, salió de Las Palmas con dirección al puerto de las Isletas, donde debía embarcarse, acompañada de una vistosa comitiva.



    Rondaba por entonces estos mares un hidalgo lusitano, llamado Gonzalo Fernández de Saavedra, que con dos carabelas armadas en corso asaltaba las embarcaciones, robando y saqueando cuanto al paso encontraba y llevando el terror hasta los mismos pueblos litorales de las Islas. Este corsario, que se apreciaba de galante y guapo, al tener noticia del viaje de Rufina quiso aprovechar la ocasión y, desembarcando en la playa del puer- to, atacó de improviso la comitiva, dispersóla y apoderándose de la hermosa herreña se encerró con ella en la ermita de Santa Catalina y por fuerza húbola.



    El fruto de esta sacrílega violación fue doña Beatriz de Saavedra, educada por su madre en Las Palmas y a la cual el conde amó, persiguió y dio palabra de casamiento, obteniendo de ella favores de esposo. Nacieron de este clandestino enlace tres hijos llamados don Fernando, doña Ana y doña Catalina que llevaron los apellidos de Sanniento, Peraza y Ayala.



    Siguiendo las inclinaciones de su voluble carácter y de sus desordenados apetitos, o tal vez impulsado por crecientes ambiciones, determinó abandonar a su desgraciada víctima y, pretextando negocios urgentes, se alejó de Canaria y pasó a España, casándose en Jerez de la Frontera con su prima doña María de Castilla, hija del corre-gidor de aquella ciudad don Pedro Xuárez de Castilla, que le llevaba en dote dos millones trescientos mil maravedíes.



    Sucedía esto cuando Lope de Sosa era trasladado al Darién, dejando vacante el gobierno de Gran Canaria, y, ya fuese porque el conde lo deseara o porque el don Pedro creyese mejorar su posición, solicitó y obtuvo en 1517 el nombramiento de gobernador de aquella isla a donde se trasladó con su familia acompañado de su yerno.



    Entretanto, la desgraciada doña Beatriz, enterada de aquel verdadero casamiento y perdida toda esperanza de protección y cariño, se retiró a la isla de La Palma y se consagró a la educación de sus hijos y a llorar sus perdidas esperanzas.



    El nuevo gobernador llegó en el momento en que varios corsarios franceses infestaban aquellos mares, interrumpiendo las comunicaciones entre las islas y apoderándose de todos los buques que llevaban bandera española.



    Cuéntase que, en 1522, apareció en la rada de Las Palmas el francés Juan Florint con siete naos armadas en guerra, y sin ponerse el astuto marino al alcance del fuerte de las Isletas, único que había en aquel litoral, estuvo algunos días cruzando sobre aquella altura, hasta que vio acercarse una escuadrilla que llegaba de Cádiz con familias y mercaderes y de cuya llegada tenía sin duda aviso, y sin vacilar le dio caza y la apresó a la vista de la misma ciudad. El gobernador, entonces, armó inmediatamente 5 naos que estaban en el puerto y, proveyéndolas de armas y gentes y dándoles por capitanes a los dos hermanos Arriete y Juan Perdomo de Béthencourt, las envió en persecución de los franceses, que ya entraban con su presa en la rada de Gando. Trabóse allí un encarnizado combate, viéndose al fin obligados los corsarios a abandonar la escuadrilla española, retirándose con sus naves al sur de la isla para reparar tranquilamente sus averías. Desde estas costas hizo rumbo a las Azores, con tan buena fortuna que apresó dos navíos donde Hernán Cortés enviaba al Emperador la recámara de Moctezuma, con muchas barras de oro y plata y gran copia de piedras preciosas.”(Agustín Millares Torres; 1977, t. III: 79-81



    1505. En la localidad de Icoden Chinech (Tenerife) se estableció desde 1505 el primer ingenio azucarero por el invasor conquistador Alonso Fernández de Lugo, que se reservó también las aguas y veinte fanegadas de tierras. Empleaba tanto trabajadores libres como esclavos. En 1506 ya contaba con unos 40 vecinos, lo quiere decir una población sobre las 200 personas. Pero sus condiciones naturales no eran especialmente para el cultivo azucarero, sino para el viñedo, en el que ganaría en preponderancia sobre Garachico. Es por ello pueblo dependiente de aquel en la órbita mercantil, aunque desde la caleta de San Marcos habrá un cierto comercio y se desarrollaría una primaria construcción naval con astilleros gracias a las ricas maderas de sus bosques por entonces vírgenes. Mientras que la caña de azúcar hasta mediados del siglo XVI fue el cultivo hegemónico, Garachico será la capital demográfica y económica de la comarca de Daute. No obstante, a medida que avanza la centuria Icod sigue creciendo en población y prosperidad. En 1585 contaba ya con 350 vecinos, lo que da un total aproximado de 1750 habitantes, frente a los 520 (2600 h.) que albergaba Garachico. En torno a esa época Fray Alonso de Espinosa diría de él que era un pueblo de mucha vecindad y hombres honrados y ricos, está edificado en la falda del Teide con buenos edificios y hay en él mucha madera. El portugués Gaspar Fructuoso lo definiría como villa de doscientos vecinos, casi todos portugueses, rico de vinos, labores y crianzas. Hácese mucho vidrio que va para otras islas y algunas veces para las Indias de Castilla para hacer estilas aguardientes para las minas por ser vidrio muy duro. Dejo testimoniado la riqueza de sus campos, pues entre Icod y Garachico había 2 leguas de viñas y cañas de azúcar.Es a partir de las últimas décadas del siglo XVI y especialmente en la primera mitad del siguiente donde crece y se expansiona considerablemente Icod con el auge vinícola. Sus tierras eran óptimas para el cultivo de la vid, especialmente de vidueño, que proporcionaba un vino blanco de relativa graduación que encontraba un amplio mercado en las colonias portuguesas y británicas de América. En menor medida del malvasía, un vino de alta graduación con diferentes variedades (dulce, blanco y seco) que encontraba demanda en Europa, especialmente en Gran Bretaña. No es casual por ello que sea el siglo XVII la centuria de su consolidación, donde se construirían sus edificios e iglesias más suntuosos a tenor de la riqueza y prosperidad de sus caldos, y en el que su elite nobiliaria iniciaría un proceso de vinculación de sus propiedades para evitar su disgregación y para consolidarse como tales a través de los mayorazgos, por los que el primogénito heredaba en usufructo el gruesos de la herencia. El crecimiento demográfico nos puede ayudar a entender la evolución social y económica de Icode en una centuria de crecimiento. En 1676 ya contaba con una población de 3006 habitantes, lo que lo convertía en la tercera localidad de la isla, superada ya sólo levemente por Garachico, que contaba con 3025, La Orotava (5782) y La Laguna (6683). Nuñez de la Peña diría en 1678 que "puedes ser villa, por ser tan grande, con gente en su jurisdicción de todos frutos, de vinos de malvasía, trigo, centeno y otras semillas, lábrase mucha seda". Dice que cuenta con la buena parroquia con dos beneficiados y buenos capellanes, y que sus vecinos son amantes de la música, que "todo los de este lugar son más a ella que otros, y los más tienen buenas voces". También constata que se conocían entre sí por sus apodos más que por sus apellidos. Por esa fechas ya albergaba dos comunidades regulares, los franciscanos y agustinos, y un monasterio de monjas bernardas. Destaca la devoción que gozaba San Felipe Neri y su ermita, "de mucha devoción en toda la isla" y la existencia de dos escribanías, el mismo número que Garachico, lo que es indicativo de su expansión e intensa actividad mercantil.En 1591 sus milicias quedaron desmembradas de la dependencia y sujeción de Garachico, una pugna que será constante en la lucha por la hegemonía de Daute entre ambos municipios. En 1687 logró alcanzar la independencia también en la órbita inquisitorial con la consecución de una Comisaría de la Inquisición propia. Contaba con un hospital para pobres desde 1555 que en 1697 fue ampliado con la constitución de un patronato al Canónigo de la Catedral de Las Palmas Francisco Leonardo de la Guerra. Desde 1585 contaba Icod con un convento agustino bajo la adveración de San Sebastián. Se estableció en una antigua ermita de ese nombre. Su patronato fue más tardío y recaería en 1655 en uno de los más ricos e influyentes colonos de la localidad, Blas de Alzola y Torres. (Manuel Hernández González)



    1505. 763-5.-Pedro Gomes. Pide 4 f . de r. y deja en blanco el lugar. El Adelantado enmienda la cifra en 3 y pone Valle de Salazar. 1505.



    1505 Enero 1. 60-22.-Doña Inés de Berrera mi fija. Toda el agua q. se ha descubierto e parescido ...entre el río de ycode e entre la hazienda q. tiene Cristóbal de Ponte ginovés con todas las tas. q. pudiéredes aprovechar en el dho. término. Digo con condición q. seáis obligada de hacer un ingenio para moler las cañas q. oviere para moler y para ello vos do término de quatro años desde oy. 8-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 2. 428.-En jueves, dos días del mes de enero del mill y quinientos y cinco años, fueron ayuntados en Cabildo en la yglesia de Santa María de la Concebición, el señor teniente Alonso de Belmonte y los regidores Lope Fernandes, Fernando de Trugillo y Mateo Viña y Fernando de Lerena y Pero Mexía.



    429.- E luego todos 1os dichos señores platycaron sobre que a sus noticias a venido que sus Altezas an puesto o quieren poner en esta ysla los derechos que se pagan en Grand Canaría o como quiera que sea, para que sobre ello supliquen a sus Altezas que porque esta ysla aún no está poblada y aviendo en ella derechos sería echar a perder la isla y despoblarla, lo qual sería desservicio de sus Altezas, acordose lo sygulente:



    430.-E luego los dichos señores platycaron en que dixeron que muchos vecinos vernían a esta ysla ase avezindar y por defecto que no saben sy tyenen franqueza dexan de venir de cuya cabsa esta tierra está despoblada:



    431.-Y que para esto dixeron que será bien enbiar a sus Altezas a suplicar que diesen carta de franqueza, pues que aquella se da a las tierras nuevamente se ganan, porque esto es conplidero a su servicio y bien y población de la tierra; acordóse de haz ello saber a sus Altezas y enbiar persona con poder para que lo negocíe.





    1505 Enero 2. 432.- Fol. 39 v. En jueves, dos días del mes de enero de Mdv años, se pregonó en qua- tro pregones esta hordenança de los gomeros para que todos saliesen de la ysla como en la dicha hordenança se contyene; pregonóse públicamente en esta plaça desta villa y en otros tres lugares departydores por Francisco pregonero, de bervo a verbo, como en la dicha hordenancça se contyene, en alta boz. Testigos, francisco Serrano, Gonçalo Rodríguez, Matín Martínes, AlfonsoVaez, Pero López de Villera y otros muchos vecinos e moradores, estantes y abitantes en la dicha ysla.=Antón de Vallejo, escrivano público.



    433.-En domingo, doze días del dicho mes del dicho año de quinientos y cinco años, se pregonó la hordenan~a de los pesos y medidas, en alta boz, por Francisco, pregonero público, en saliendo que salieron de bísperas e de oyr el sermón de señor Sant Lazaro; a que fueron testigos Fernando de Truglllo, fernando de Lerena, Lope Fernandes, regidores e otros muchos.=Antón de Vallejo, escrivano público.



    1505 Enero 2. Dto. 700-42.-Ybone de Armas. 5 f . con su agua q. es en el barranco del Baradero a par de Juan Sanches en pasando el dho. barranco. Si otros alvalaes hoviere antes deste q. por cuanto non han sido delicadas vos las do para q. las deliquéis. Vos do las dhas. 5 f . para viña con tal q. pongáis luego sarmientos. 2-1-1505.



    1505 Enero 2. Toro. Orden al adelantado don Alonso Fernández de Lugo, gobernador de Gran Canaria, a petición de los vecinos de San Miguel de La Palma, para que releve a su sobrino Juan de Lugo, del cargo de teniente. De gobernador, que ha desempeñado durante ocho años, y nombre un sustituto. El Rey. Grizio. Episcopus cordubensis. Zapata. Moxica. Carvajal. Santiago. Polanco. (E.Aznar; 1981)



    1505 Enero 2.



    428.-En jueves, dos días del mes de enero del mill y quinientos y cinco años, fueron ayuntados en Cabildo en la yglesia de Santa María de la Concebición, el señor teniente Alonso de Belmonte y los regidores Lope Fernandes, Fernando de Trugillo y Mateo Viña y Fernando de Lerena y Pero Mexía.



    429.- E luego todos 1os dichos señores platycaron sobre que a sus noticias a venido que sus Altezas an puesto o quieren poner en esta ysla los derechos que se pagan en Grand Canaría o como quiera que sea, para que sobre ello supliquen a sus Altezas que porque esta ysla aún no está poblada y aviendo en ella derechos sería echar a perder la isla y despoblarla, lo qual sería desservicio de sus Altezas, acordose lo sygulente:



    430.-E luego los dichos señores platycaron en que dixeron que muchos vecinos vernían a esta ysla ase avezindar y por defecto que no saben sy tyenen franqueza dexan de venir de cuya cabsa esta tierra está despoblada:



    431.-Y que para esto dixeron que será bien enbiar a sus Altezas a suplicar que diesen carta de franqueza, pues que aquella se da a las tierras nuevamente se ganan, porque esto es conplidero a su servicio y bien y población de la tierra; acordóse de haz ello saber a sus Altezas y enbiar persona con poder para que lo negocíe.



    1505 Enero 2. 569-36.-Diego de Badajós. Una huente de agua q. es entre Agache e 1mobade y Abona, q. es término desta isla con toda la ta. q. pudiere aprovechar en q. pongáis una viña más un asiento de colmenar en la fortaleza de Adexe e más 50 f . para año y vez en la parte donde vos las quisierdes. q. vos do el agua con tal q. sea para otros vs. y para vuestros sobrinos y vos do el asiento de colmenas pero el sequero quede para otros q. vinieren a vevir en la ta. ya vos do un c. de sembradura. 2-1-1505. [Margen superior, de otra mano: «el barranco del Sauzal de Tamaday»].(Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 2. 432.- Fol. 39 v. En jueves, dos días del mes de enero de Mdv años, se pregonó en qua- tro pregones esta hordenança de los gomeros para que todos saliesen de la ysla como en la dicha hordenança se contyene; pregonóse públicamente en esta plaça desta villa y en otros tres lugares departydores por Francisco pregonero, de bervo a verbo, como en la dicha hordenancça se contyene, en alta boz. Testigos, francisco Serrano, Gonçalo Rodríguez, Matín Martínes, AlfonsoVaez, Pero López de Villera y otros muchos vecinos e moradores, estantes y abitantes en la dicha ysla.=Antón de Vallejo, escrivano público.



    433.-En domingo, doze días del dicho mes del dicho año de quinientos y cinco años, se pregonó la hordenanza de los pesos y medidas, en alta boz, por Francisco, pregonero público, en saliendo que salieron de bísperas e de oyr el sermón de señor Sant Lazaro; a que fueron testigos Fernando de Truglllo, fernando de Lerena, Lope Fernandes, regidores e otros muchos.=Antón de Vallejo, escrivano público.



    1505 Enero 2. 700-42.- Ybone de Armas. 5 f . con su agua q. es en el barranco del Baradero a par de Juan Sanches en pasando el dho. barranco. Si otros alvalaes hoviere antes deste q. por cuanto non han sido delicadas vos las do para q. las deliquéis. Vos do las dhas. 5 f . para viña con tal q. pongáis luego sarmientos. 2-1-1505,



    1505 Enero 3. 269- .-Juan de Fonte y Fernand Martín. [Traslado del título o data q. sigue, traducido al castellano].

    270-25.-Joham de Fontes e Fernán Martínez. «Muy manífico señor: J. de F. e F. M., portugueses estantes que somos em esta ilha, fazemos saber a vuestra señoría q. por quanto avemos estado em a dha. yslha e trabalhado em ella de nuestros oficios e porque, señor, queremos tomar vezindad em elha e em elha abitar, por tanto pedimos a vuestra senoría q. por bem da dha. abitaam e vezindá aja por bem de nos fazer mercé e nos queyra dar tas. Em elha para ntro. viver e soportamento anbos juntamente, convem asaber em Erjos des das covas q. estam no barranco para bayxo hum pedaço em q. aja cem fanegas de sequeyro e outro pedaço em ho Palmar em q. aja outras cem fanegas, convem a saber da banda de allende do barranco contra o Carrizal des da montanha pa bayxo e mais hum pedaço para hum solar para colmenar em dareyto de hum outro q. vtra. señoría deu a Talaveyra q. será ta. de dous quayzes e em ell vtra. señoría fara servico a Deos por sermos homes pobres a nos muito mercé. q. digo q. vos do 100 f . de senbradura para anbos hermanos en qualquier de los lugares q .señaláis y más el dho. asiento de colmenas ...» 3-1-1505.



    1505 Enero 5. 745-26.-Michel Gonzales. 6 c. en sobre la primer cuesta q. sale de Taoro para Asentejo dende la sobida de la cuesta fasta un drago q. está adelante desmochado, de camino arriba los 4 c. y del camino abajo los 2. Dos c. y medio en el dho. lugar y si algo vos he dado sea complimiento seis (?) c. y medio. 5-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 8. 80-41.-Juan López. 6 c. en una ta. do vos tenés fechas unas casas en Tacoronte en las cabeçadas arriba de los majanos q. hizo Lope Hernandes Guillem, linde Alonso de las Hijas y el barranco q. va ta. de los Machados. Vos do 50 f . 8-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 8. 506-21.-Pedro de Uncella. Un solar junto con la casa de Bartolomé Benítez, de 50 pasos de archor y por la otra parte el camino q. va de la iglesia a Santa Cruz y de la banda de arriba el camino q. va de la plaza pora la iglesia y de la otra banda el solar de Juan [testado] Páez. 8-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 8. 458-35.-Juan de Çamora. Doy a vos J. de Ç. por vecindad 2 c. en la Arahutava de s. en q. el medio c. es cabe la mar en q. está cabe unos cardones y está en la dha. ta. un drago

    pequeño linde con las tas. de r.; y el otro c. y medio en otro lomo derecho de las cañas de Bartolomé Benites; y otros 2 c. en una rehoya del camino q. va a la Villa facia arriba a la montaña derecho de la cueva de los almocreves arriba más acá de un drago facia el Realego [sic] q. linda con Guillén Castellano.q O. vos do 2 c. donde quiera q. los tomardes en los lugares q. señaláis. 8-1-1505.



    [Reverso; carta de J. de Ç. a Lope Fernandes: «Muy virtuoso Sr. L. F.: después d estar a lo q. V. M. mandare vos hago saber como tenía venir a fablar con V. M., q. era cosa q. mucho me cunplía y porq. teníamos de ir a fazer el mal paso q. nos amostrastes, no puedo venir y la cahusa dello es esto q. yo devo a Encencio Gomes quinientos maravedís y me trray huna suerte de cañas en pl y me dixo q. él devía a V. M. dineros y q. le sacase de V. M. y q. él se dava por contento; e, Señor, gelo pido de merced porq. acá me averá menester o se lo paga ...en dineros; del camino le fago saber como está fecho q. con un ? de yuntas lo tirará menor; por agora no más sino q. quedo a lo q. V. M. mandare.- Juan de Çamora»].(Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 8. 515-30.-Diego Peres. Las tas. q. fueron de vuestro hermano Antón Sanches de Turel q. Dios haya, las cuales vos doy como a su hermano y heredero. Reservando su derecho a salvo a Juan Agostín Salvago, vo. de la Gomera, para q. vos D. P. le seais obligado a pagar los 10 mil e 8 cientos mrs. q. le eran debidos por el dho. A. S. vuestro hermano y después por Espino en su nombre 8-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 11. Dto. 1.854-19.-Diego Delgado, canario. Una suerte de t. de riego en el Araotava, bajo de Lope Gallego. El Adelantado. 11-1-1505. 1505 Enero 11.



    59-21.-Lope de Mesa. Lope Fernandes y Guillén Castellano:

    Amigos sabed q. se me quexó y fiso relación disiendo q. algunos labradores y vs. de Tacoronte aran y quieren senbrar por fuerza y contra su voluntad unas tas. suyas ...de la Ranbla de los Cavallos. 11-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 11.

    730-9.-Juan Delgado. Por cuando hube dado a Francisco Mayor, defunto, 3 c. de ta. de s. en Higan cabo del pino entre Higan e Guillén Castellano y no se ha rompido, q. vos lo do a vos J. D. q. vos do 2 c. 11-1-1505 (o 6). (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 13. Toro (f. 40). Presentación de Francisco de Bobadilla, criado del tesorero Alonso de Morales, para una ración de la iglesia de Canaria, que dejó vacante el prior Alonso de Vivas, elegido canónigo de dicha iglesia en sustitución del difunto Pedro de la Fuente. Se ordena que el obispo de Canaria le dé posesión y haga que le sean entregados los derechos que le corresponden. El Rey. Zafra. Zapata. Angulo. Polanco. (E.Aznar; 1981)



    1505 Enero 13. Toro (f. 41). Presentación de Alonso de Vivas, prior de la iglesia de Canaria, para una canongía de la misma, vacante por fallecimiento de Pedro de la Fuente, canónigo y arcediano. Se ordena que el obispo de Canaria le dé posesión y haga que le sean entregados los derechos que le corresponden. El Rey. Zafra. Zapata. Angulo. Polanco. (E.Aznar; 1981)



    1505 Enero 14. 370-28.-Benito Gonzales. Doy a vos fijo de Gonzalo Yanes vo de Daute, 100 f . de ta. de s. y en la «jelechera» adonde cortan la leña para el engenio de vuestro padre. q. vos den en vecindad 40 f . 14-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 14. Toro. Merced al Ido. Luis de Zapata, del Consejo Real, de unas caballerías de tierra en el reino de Daute, isla de Tenerife, que el genovés Mateo Viña poseía ilegalmente, por no ser residente en dicha isla y por estar prohibido a los extranjeros poseer heredades valoradas en más de 200.000 maravedís. Se ordena al adelantado don Alonso de Lugo y al gobernador o juez de residencia de Gran Canaria que le den posesión de dichas tierras. El Rey. Grizio. Angulo. Zapata. (E.Aznar; 1981)



    1505 Enero 14. Toro (f. 48). Incitativa al gobernador o juez de residencia de Gran Canaria, para que determine en la demanda interpuesta por Beatriz Rodríguez, vecina de La Gomera, contra Alonso de Lugo, que se apoderó de los bienes de Pedro Rodríguez, su marido, y lo tiene en prisión sin admitir fianza, por haber dicho que podía acrecentar en un cuento de maravedís al año las rentas reales. El Rey. Zafra. Episcopus cordubensis. Zapata. Muxica. Carvajal. Santiago. Polanco. (E.Aznar; 1981)



    1505 Enero 5. 804-45.-Rodrigo Yanis. «Por quanto entre los vs. del Araotava es concertado q. R. Y. se obliga a sacar e tener sacada un agua ques en la montaña e terla en sus dornajos para en q. puedan bever los ganados para lo qualle dan 15 mill mrs. e más el agua q. sobrare, por tanto mando al Teniente e a todos los otros vs. q. vayan a ver la dha. agua e q. tomen un c. de ta. de la q. estuviere más cerca e donde sea más conveniente e cerca de dha. agua e para los caminos e servidumbres de los ganados e la q. a ellos les pareciere den al dho. R. Y. por el trabajo de sacar e tener en q. los dhos. ganados puedan bever e si fuere dada a alguno la dha. ta. yo le daré otro tanto en otro cabo. Digo q. ansimismo se le dé un pedazo de ta. para en q. haga una huerta porque pueda mejor tener el agua». 5-1-1507. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 14. 61-23.-Antonio Bortega. La fuente de Berjos con 6 f . de r. junto con dha. fuente con tal condición q. dexéis libre entrada para la dha. fuente por donde se puedan servir los otros vs. q. allí fueren a poblar e q. puedan abrevar sus ganados, más 50 f . de t. de s. en el



    1505 Enero 14. 529-44.-Belchior Gonzales, fijo de Gonçalo Yanes de Daute. 60 f . entre dos montañetas q. están del barranco del agua q. viene al engenio en Taco, de los almácigos contra la mar. q. vos do 30 f . 14-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 14. 511-26.-Francisco Gonzales hijo de Gonzalo Yanes, vo de Daute. 60 f . en el Palmar.. q. vos 20 f . 14-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 14. 512-27.-Juan Gonzales hijo de Gonzalo Yanes, va de Daute 100 f . en una lombada acima de la fuente de Arrayalejo cuentra qerjos. Q. digo q. vos den como a pobladores 50 f . 14-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)



    1505 Enero 14. 513-28.-Gaspar Gonzales hijo de Gonzalo Yanes, va de Daute. 60 f . alén del barranco de Taco, entre los almácigos. q vos den 30 f . 14-1-1505. (Datas de Tenerife, libros I al IV)

    *Guayre Adarguma Anez Ram n Yghasen.


    Para saber más: logokbehibenchomo.jpg (24851 bytes)

    ResponderEliminar