RETRODEZCAN

Este imperativo es del todo incorrecto pero me resulta más contundente que el original RETROCEDAN. Por lo tanto, si la Real Academia de la Lengua Española me lo permite, desde hoy en adelante haré uso exclusivo de él.
Con RETRODEZCAN pretendo dar a conocer parte de mi obra pictórica, escultórica, fotográfica y, en menor proporción, literaria y, a la vez, mantener una corriente de opinión sobre los acontecimientos de naturaleza artística de hoy día.
Espero que tomeis la sabia decisión de manteneros a una distancia prudencial de mis opiniones aquí vertidas que no siempre tienen por que ser del agrado de la mayoría; ¿o, sí?

martes, 16 de diciembre de 2008

Arturo PANETTA (arpista argentino)

Hoy, casualmente, navegando por Internet en busca de una información que precisaba con relativa urgencia, tuve la agradable sorpresa de encontrar una reseña sobre un disco grabado en 1996 bajo el título de "Canarias sin distancia" y en cuya carátula aparecía la foto de Caco Senante.
No es ninguna sorpresa que Caco haya grabado un nuevo disco, siempre bienvenido para sus paisanos, sino que entre sus músicos invitados, entre otros, figurara el arpista Arturo Panetta a quién le había perdido la pista desde hace muchísimos años; desde que dejamos de tocar juntos cuando formábamos parte de un cuarteto compuesto por él mismo, Antonio y Pedro Serrano, y yo y que bautizamos con el artístico nombre de Folklore 4.
Arturo Panetta era tan buen músico como persona violenta y esa es la razón por la que no guarde una agradable experiencia en torno a lo que aparentemente hubiera supuesto una nueva y sincera amistad musical. Bien es verdad que eran tiempos difíciles para todos, incluido para mí que era el único de los cuatro con nacionalidad española.
En principio, Antonio Serrano y yo formábamos un dúo que, durante mucho tiempo, alegraría las largas noches de "El Greco", local regentado por Edmundo del Ródano y donde llegamos a alcanzar una cierta notoriedad como intérpretes.
Nuestra mutua ruptura con Edmundo coincidió con la llegada al Puerto del hermano de Antonio, Pedro, quién además de cantar, tocar la guitarra y las maracas , ámbas cosas estupendamente, era un portento con el guitarrón, con el que nos garantizaba una base rítmica muy sólida sobre la que descansaba nuestro variado y vistoso repertorio, además de nuestro éxito. Se sumó inmediatamente a nosotros y formamos un trío con el que pretendíamos abrirnos paso en el dificil panorama musical de entonces en la isla.
Panetta aparecería más tarde. No recuerdo cómo pero avalado por una tradición como arpista muy poco común en Argentina. Natural de la provincia de Córdoba e hijo de padre también arpista, poseía un dominio absoluto del instrumento lo que le valia la justa fama de la que venía ya precedido.
He de suponer que mi formación musical estaba muy por debajo de la de cualquiera de los tres, pero solo Panetta, con su grosera actitud además de su intolerable jactancia, fue lo suficientemente capaz como para convencerme de ello. Y como los tiempos eran tan difíciles que donde comian tres no podían comer cuatro, Arturo, por su cuenta, se preocuparía de soltar lastre y para ello, una noche que había bebido demasiado y en la que discutíamos por razones ajenas a la propia música, me arrojó con tal violencia una botella de coca cola que si hubiera impactado en mi cabeza esta habría quedado con más grietas que las que le produjo a la pared contra la que fue a estrellarse; desagradable incidente con el que se selló mi ruptura definitiva con Folklore 4.
Lo pasé mal durante algún tiempo pero me rehice de nuevo cuando Ozores Souto me planteó la posibilidad de abrir un pequeño local con música en vivo y a la vez Bar-Restaurante. Ese proyecto fue el principio de lo que luego se conocería popularmente bajo el nombre de PAPRIKA.

1 comentario:

  1. ...Y yo que pensaba que el Arpa es el instrumento de los angelitos...vaya,vaya...Argentino al fin y al cabo...!

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