NACARIA (Ed. Narrativa Mondadori)

Confieso no haber tenido ocasión de haber leido algo de lo publicado por ese gran narrador canario que es SABAS MARTÍN. Concretamente he comenzado con NACARIA, premio nacional de novela "ALFONSO GARCÍA RAMOS" 1989, del Aula de Cultura del Excmo. Cabildo Insular de Tenerife y he quedado gratamente sorprendido no sólo por su impresionante lirismo sino, además, por ese estilo tan barroco que en ocasiones caracteriza la peculiar idiosincracia de los isleños.

He vuelto a encontrarme con el paisaje y el paisanaje de mi tierra y me he dejado llevar en alas de ese particular léxico que forma parte de las profundas raices de nuestro propio lenguaje y acervo popular.

NUEVA MONARQUÍA PARLAMENTARIA

DISPOSITIVOS DE SEGURIDAD EN MADRID

ABDICACIÓN DE JUAN CARLOS I

Ni quito ni pongo Rey sino (pero) ayudo a mi señor.

Famosa frase atribuida a Bertrand du Guesclin, aliado de ENRIQUE, hermano bastardo de PEDRO I “El Cruel”.

Luchaban entre sí Pedro I y su hermano bastardo Enrique. Pedro se disponía a dar muerte a su hermanastro Enrique, cuando Bertrand du Guesclin asió de la pierna a Pedro I cosa que aprovechó el bastardo Enrique para dar muerte a Pedro.

Ante esta situación, el francés Bertrand pronunció la famosa frase que se le atribuye: NI QUITO NI PONGO REY SINO AYUDO A MI SEÑOR

EL PESO DE LA DEMOCRACIA

¡¡ P O D E M O S !!

 

A B D I C A C I Ó N

SIN PALABRAS

HACIA LA ERMITA DE SANTA CECLINA

Esta pieza de terracota a tamaño natural la he creado en honor a SANTA CECLINA. No soy creyente pero cerca de donde vivo existe una ermita abandonada cuyo nombre es el de la Santa y los visitantes suelen extravíarse al llegar a la altura de mi casa. He decidido por tanto incorporar el busto ante la vivienda señalando el camino correcto hasta la abandonada ermita.

 

Si quereis ver el resto de mi obra de los últimos años "clicar" en el enlace a continuación:

 https://www.flickr.com/photos/zoilolobo/sets/72157604428490801/

VIVIR ASÍ O MORIR DE OTRA MANERA

¡No! Las armas no las carga el diablo; las carga la codicia, la prepotencia, la jactancia, la avaricia y ocurre que la liviana artillería que aquellas contienen se vuelve contra el codicioso, el prepotente, el jactancioso, el avaro, etc. quienes en ocasiones alcanzan la muerte víctimas de sus propios vicios.

Hoy dia, carecer de empleo, por ejemplo, y por lo tanto de sueldo, de prestaciones sociales, deshauciado, enfermo, etc., etc. es como estar muerto en vida porque la agonía es tal que uno termina por convertirse en víctima indefensa del sistema.

¿Cual es la diferencia entre vivir así y morir de la otra manera?