RETRODEZCAN

Este imperativo es del todo incorrecto pero me resulta más contundente que el original RETROCEDAN. Por lo tanto, si la Real Academia de la Lengua Española me lo permite, desde hoy en adelante haré uso exclusivo de él.
Con RETRODEZCAN pretendo dar a conocer parte de mi obra pictórica, escultórica, fotográfica y, en menor proporción, literaria y, a la vez, mantener una corriente de opinión sobre los acontecimientos de naturaleza artística de hoy día.
Espero que tomeis la sabia decisión de manteneros a una distancia prudencial de mis opiniones aquí vertidas que no siempre tienen por que ser del agrado de la mayoría; ¿o, sí?

jueves, 25 de diciembre de 2008

HABITAT. Puerto de la Cruz (TENERIFE)

Hoy es Navidad. Como cada 25 de Diciempre me embarga, por estas fechas, una seria melancolía que, lo más probable, tenga su origen en mi larga ausencia de Canarias, tan alejado de la bonanza de los Alisios y de esa calma tibia que envuelve el ambiante cuanto más cerca del cotexto del Sur nos encontramos.
Por suerte, solo dura unos instantes. Es como una ráfaga que emerge de pronto del subconsciente para depositarse mansamente, un instante tan solo, en la precaria memoria de este espíritu agitado que hoy, precisamente, debe soportar estoicamente su ubicación inconrrecta en el espacio, entre las bajas temperaturas de otras frías latitudes que le son por completo ajenas y de las que tampoco, por el momento, puede prescindir.

3 comentarios:

  1. Entiendo -mejor dicho: me hago cargo- la melancolía, la 'morriña', la nostalgia...Pero no hay que entristecer. Hay que avanzar, hacer cosas nuevas, seguir trabajando... Sin rutinas, sin efectos mecanicistas, sin norias girando al mismo ritmo... Todo pasa y todo queda, sentenció el poeta. Luego, confiemos en un mundo mejor, en la amistad, en todos aquellos valores que deben inspirar un porvenir fecundo, pletórico de alegrías... En las techumbres seguirán sobresaltando todos los espíritus juveniles que no abandonarán jamás su carrera. Por muchos años que cumplan. Un abrazo.

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  2. Gracias, Salvador.Ya ha pasado el instante al que me refería. Aún así, ese recuerdo será una mácula siempre latente en el fondo de la remota memoria que tiñe de gris el recuerdo y que solo el retorno puede evitar.

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  3. gRCIAS POR TU comentario Borbónico. Muy agudo con lo de la sangre azul y rojo. Je je. Sigo visionando a diario la historia viva en fotografías del Puerto. un saludo

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