En ocasiones, también los sociólogos disponen de argumentos
contundentes con los que combatir la estulticia
DIÁLOGO
SOBRE ENCUESTAS (por
Zoilo López)
Cytizen Kane y la socióloga Sánchez
de Serdio coinciden casualmente en
una conferencia en un lugar no identificado de Barcelona.
_¿Sabía Vd. señorita Sánchez de
Serdio que por cada hombre extremadamente inteligente hay diez mujeres que sólo lo son
medianamente?
De Serdio soltó una sonora carcajada
para seguidamente argumentarle que era mucho más idiota de lo que parecía.
-¿Se jacta Vd. de ello, Sr. Kane,
o es que se cree muy listo? porque por
las encuestas que yo manejo de cada mil hombres, precisamente, sólo uno de ellos es extremadamente
inteligente.
-¿Y cuál es la conclusión a la
que ha podido Vd. llegar, Srta. De Serdio? porque me parece que eso no cambia
absolutamente nada las cosas.
-Naturalmente que cambia. La evidencia
parece demostrar que Vd. resulta extremadamente idiota porque si enfrentamos
ese número de hombres de la estadística a un mismo número de mujeres, teniendo
en cuenta que de cada mil hombres sólo
uno es extremadamente inteligente, la conclusión a la que llego es que los novecientos
noventa y nueve restantes son idiotas. De
lo que se desprende que de las mil
mujeres, sólo diez serán consideradas medianamente inteligentes frente a cada
uno de los hombres extremadamente inteligentes y, en consecuencia, las novecientas noventa mujeres restantes resultan extremadamente
inteligentes. Si a ello le sumamos que, hipotéticamente, existe en nuestro país
el doble número de mujeres que de hombres estaremos de acuerdo en admitir que
es Vd. doblemente imbécil.
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