RETRODEZCAN

Este imperativo es del todo incorrecto pero me resulta más contundente que el original RETROCEDAN. Por lo tanto, si la Real Academia de la Lengua Española me lo permite, desde hoy en adelante haré uso exclusivo de él.
Con RETRODEZCAN pretendo dar a conocer parte de mi obra pictórica, escultórica, fotográfica y, en menor proporción, literaria y, a la vez, mantener una corriente de opinión sobre los acontecimientos de naturaleza artística de hoy día.
Espero que tomeis la sabia decisión de manteneros a una distancia prudencial de mis opiniones aquí vertidas que no siempre tienen por que ser del agrado de la mayoría; ¿o, sí?

jueves, 27 de noviembre de 2008

¡¡CUANDO BEBO, NO CONDUZCO!!, ¿sabes?.


si bebes no......, originalmente cargada por zoilolobo.

El guardia municipal se llamaba Correa y era natural de Los Rechazos.
Un turista, de negro riguroso, aprovecha que el agente detiene la escasa circulación para "colarse" a través del paso de cebra hasta asirse del clavo ardiendo que sustituye el mástil metálico de una triste farola, evitando así un posible atropello a la autoridad que representa su condición de alcohólico anónimo.
Se me quedó mirando tal y como muestra la foto mientras en perfecto castellano exclamaba:
¡¡Coño, si bebemos, pues, no conduzcamos!!

1 comentario:

  1. Una anécdota de Manuel Correa, el policía local. Está relatada en mi libro "Tipos y personajes del Puerto de la Cruz". Una madrugada, estando de guardia en comisaría, un borrachito al que habían detenido y metido en el calabozo, clamó a gritos por la presencia de alguien.
    -A ver, ¿quién manda aquí?-, preguntó airado.
    -Oh, en este momento yo -contestó un somnoliento Correa- porque no hay nadie.
    -¡Pues mándeme un café con leche calentito y unos churritos!-, replicó el borrachito.
    Los barrotes le salvaron, desde luego, de un cachetón de Correa.

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