RETRODEZCAN

Este imperativo es del todo incorrecto pero me resulta más contundente que el original RETROCEDAN. Por lo tanto, si la Real Academia de la Lengua Española me lo permite, desde hoy en adelante haré uso exclusivo de él.
Con RETRODEZCAN pretendo dar a conocer parte de mi obra pictórica, escultórica, fotográfica y, en menor proporción, literaria y, a la vez, mantener una corriente de opinión sobre los acontecimientos de naturaleza artística de hoy día.
Espero que tomeis la sabia decisión de manteneros a una distancia prudencial de mis opiniones aquí vertidas que no siempre tienen por que ser del agrado de la mayoría; ¿o, sí?

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miércoles, 8 de septiembre de 2010

FOTO HOMENAJE A "EL PIRULÍN"

Aquí le vemos de nuevo, en el extremo de la derecha, sentado junto a algunos de sus muchos amigos.
Según me han confirmado se tratan de Menchu, Pepe "El Moscoso" y un tercero cuyo nombre no recordamos.
Todos se encuentran absortos, siguiendo con interés las distintas faenas que los pescadores desarrollan a su regreso a puerto.
La foto está tomada en el muelle del Puerto de la Cruz

EL PIRULÍN: descanse en paz

También yo le conocí como EL PIRULÍN. 
Fué una época en la que estuve vinculado al futbol juvenil y en consecuencia relacionada directamente  con el campo de futbol de EL PEÑÓN.
Husmeando en mis archivos de negativos pude encontrar unas fotos suyas en las que aparece en segundo término durante unos carnavales celebrados allá por los años 70-80.
Con ellas quiero expresar también mis condolencias a sus amigos y familiares y recordarle como uno de los populares personajes del Puerto que siempre despertaron mi curiosidad.
Descanse en paz

viernes, 21 de mayo de 2010

"PICAPLEITOS" del tres al cuarto (M.A.E)

La mala suerte siempre me persigue; y me persigue aún cuando visito mi tierra por asuntos que van mucho más allá a los que estoy normalmente acostumbrado.
El letrado en cuestión que me recomendaron por ser el más cercano al Hotel donde hube de hospedarme no sólo atendía por un apellido rotundamente peninsular sino que, para mi desgracia, él también lo era. Y digo que lo era porque además paracía incluso jactarse de esa sospechosa idiosincracia tan ajena a los isleños que rodea a personajes de su catadura y cuyo carácter podemos encontrarlo perfectamente dibujado en la magnífica literatura de la llamada "novela negra" americana. Incluso la ubicación de su espacioso bufete  me pareció intencionadamente camuflada en el interior de una urbanización privada de apariencia sospechosamente clandestina. 

Después del fiasco sufrido, desde Barcelona hube de escribirle un E-mail en los siguientes términos:

Sr. M.A.E.:
Me parace una gran irresponsabilidad y una falta de profesionalidad la decisión tomada por Vd. al respecto de la suspensión de la defensa de mis intereses en la isla. Máxime cuando es Vd. el que ha roto el compromiso después de haber cobrado 500 euros por casi nada. En mi opinión no debería haber contratado al abogado más cercano a mi hotel  (MASSARU-Urb. LA PAZ) sino al mejor; eso hubiera garantizado una auténtica lección deontológica y no esa de la que Vd. tanto presume. Yo sí sé lo que es ética profesional que, -dicho sea de paso-, y a criterio de la mayoría de mis alumnos,  aún, por suerte, no he perdido.
 
Yo jamás le aconsejé a Vd. que hiciera valer su amistad con mis adversarios en mi favor; simplemente le otorgué poderes para que me representara honestamente. Usted ha infravalorado nuestra catadura moral. Aún así aposté por Vd. pero estaba claro de que no iba  a resultar imparcial porque de lo contrario hubiera rechazado el caso dada la supuesta amistad que parece ser mantiene Vd. con la otra parte. La ética profesional la hubiera tenido Vd. que demostrar rechazando el caso desde el principio habida cuenta de ese condicionante.
 
No estoy del todo seguro de que el Ilustre Colegio de Abogados pueda interceder en mi favor para que me devuelva Vd. los 500 euros de sus fraudulentos honorarios. Si no fuera así, le rogaría que con el cambio se tomara Vd. a mi salud un cortadito en algún "guanchinche" de la isla donde permitan  todavía la entrada  a "picapleitos"de su calaña

miércoles, 21 de abril de 2010

GRACIAS, ANTONIO DORTA

Mi gran amigo Antonio Dorta a quién conocí, por fín, personalmente en la Semana Santa de este año en La Laguna, me ha enviado un documento gráfico de sumo interés sobre mi hermano aparecido en el diario AIRE LIBRE del año 1963 y que reproduzco aquí con la particularidad de que aquella entrevista a PEPE BONILLA le fue realizada por el entonces comentarista deportivo JUAN CRUZ RUIZ.

Es curioso observar que como "alias" deportivo mi hermano utilizara mi propio nombre: ZOILO

martes, 20 de abril de 2010

PERCEPCIONES; ahora que me he quedado solo


Creo que aquel decorado de ensueño siempre, -y sin darnos cuenta hasta mucho más tarde-, le vino grande a mi familia. Aunque en un principio parecimos encajar perfectamente en él, tuvimos por contra el inconveniente de no  haber pertenecido nunca a aquel soberbio paisaje donde de continuo recibíamos suaves  aunque discretos empujoncitos para sacarnos de sus límites. Allí se movían a la perfección todos aquellos cuyas raíces permanecían desde su nacimiento vinculadas a su tierra y a su mar.
Un mar por el que mi hermano Pepe y yo sentíamos una gran debilidad y cuyas olas rompían con  energía contra aquel bastidor rocoso que sostenía el lienzo multicolor, multiétnico y casi multinacional que propiciaba la  industria de un turismo cada vez más emergente y que años más tarde  se iría deteriorando  de tal manera que hasta corríamos  el serio riesgo de que  en su desplome quedáramos sepultados para siempre bajo su pesado lienzo, afectando, de manera especial, a los foráneos y advenedizos como nosotros.
Cada uno defendía el sitio que  verdaderamente le correspondía y es justo reconocer que esa prioridad se la adjudicaran los allí nacidos y arraigados.
Mi hermano Pepe y yo proveníamos de un desarraigo social donde, desde niños, nuestro mayor entretenimiento consistía en asistir a presenciar, desde la desconchada acera, como se derretía el piche de la carretera general durante los intensos días de sol en pleno verano. Aquel suburbio inhóspito al que dividía en dos la cinta de alquitrán derretido no era otro que La Cuesta.

El nuevo decorado portuense no sólo se componía de un precioso paisaje físico que en absoluto alteraba nuestra tímida presencia en él sino que nuestros deseos, nuestras esperanzas y nuestro futuro también tenían cabida en un reducido espacio sentimental, invisible para el resto pero no para nosotros, los que llegamos de La Cuesta mientras el piche de su carretera general continuaba derritiéndose año tras año bajo el sol implacable de aquellos calurosos veranos ya pretéritos. De haber sido un espacio visible, esa reserva sentimental sobre el lienzo de aquel distinto y hermoso paisaje hubiera explicado muchas cosas sobre nosotros, sobre mi querido hermano Pepe y yo que muchos desconocian.

Una suerte maléfica parecia perseguir desde siempre a mi familia, cebándose, sobre todo, en nosotros, en mi hermano y en mí. En forma de oscuro moho enlutado, aquel incomprensible maleficio terminó  poco a poco por apoderarse del lienzo multicolor  que para nosotros significaba el Puerto, escudriñando, acechándonos desde cualquier esquina sin que Pepe y yo pudiéramos hacer nada por evitar la castración artística, intelectual, lúdica, deportiva, etc. a la que nos tenía sometidos. Y así, el bastidor que lo sostenía se fue deteriorando, se fue pudriendo bajo el peso de su funesta influencia, con peligro para nosotros , los que un día llegamos desde de La Cuesta con tan buenas intenciones de futuro.

Mucho antes de que aquel pesado telón de fondo terminara por caer  irremisiblemente sobre la  ya endeble figura de mi querido hermano  Pepe, sepultándolo para siempre,  yo ya me había descolgado de aquel rancio decorado que lentamente  se iba desdibujando en la medida que aquel moho enlutado  se apoderaba paulatinamente de él.

Junto a mi nueva familia, Carmen y Dácil, me refugié en uno nuevo, luminoso, abierto, con sus cuatro   estaciones y sus cuatro puntos cardinales de los que sólo me interesaban dos: al Norte Los Pireneos, al Sur el Mediterráneo.

Sin embargo y con permiso del excelente músico y compositor, también siempre podré cantar: .......y que le voy a hacer, Serrat, si yo no nací en el Mediterráneo?



lunes, 19 de abril de 2010

SOUL MAN: Pepe Bonilla. Descanse en paz

Recuerdo a mi hermano, PEPE BONILLA, en su época de esplendor. En la época en que con su propio grupo actuaba los domingos por la tarde en la terraza del CINTRA PLAYA en la Playa de Martianez, hoy ya desaparecido. Sólo tengo presente el nombre de uno de sus miembros: LEOCADIO quién tocaba el saxofón acompañado de mi hermano al bajo eléctrico. Y hacían SOUL, música que despertaba en mi hermano un profundo sentimiento artístico y que valía la pena escuchar por entonces en un Puerto de la Cruz donde fueron pioneros de aquella música nueva de cuyos intérpretes y compositores tenía mi hermano una vasta colección de LP's. que habrán heredado sus hijos.

Como homenaje a aquellos años de su alegre juventud inserto una de las varias fotos encontradas en mi colección de negativos. Así es como me gustaría recordarle siempre: sano y alegre

domingo, 18 de abril de 2010

PEDRO GONZÁLEZ: mi exprofesor de Bellas Artes

A propósito de mi paso por la Escuela Superior de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife, durante el curso de Preparatorio del 73-74, me gustaría referir una anécdota que tiene una relación directa con el octogenario pintor Pedro González a la sazón profesor mio de colorido.

Aún conservo las calificaciones de entonces donde figura el suspenso con un 4 de la asignatura de colorido que impartía Maribel Nazco pero cuyo responsable no era otro que el profesor Pedro González. Se trataba, pues, de los estudios de Bellas Artes del Plan 1942.

Aquel suspenso que en absoluto me esperaba supuso para mí tan gran decepción que treinta y seis años más tarde, con tal de superar aquel trauma que se apoderara de mí desde entonces, decidí matricularme en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Barcelona donde aún permanezco.

No es nada probable que el respetable Pedro González conozca lo frustrado que me sentí hace ya treinta y seis años con aquel suspenso. No obstante, con motivo de su reciente exposición en Tenerife le deseo de todo corazón el reconocimiento artístico que siempre se ha merecido y que sin duda alguna aún retiene como prueba fehacientemente su impecable trayectoria pictórica

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                     

jueves, 8 de abril de 2010

De los amigos hechos por Internet

Por lo que me han contado, no suele ocurrir con frecuencia que uno se lleve una grata sorpresa al conocer personalmente a aquellos con quienes a través de Internet se ha mantenido una cordial relación durante años  sin ni siquiera vernos. No ha sido este mi caso. Tanto Antonio Pedro Dorta como Bruno Alvarez me han desbordado con sus respectivas personalidades y me han sorprendido gratamente con la evocación que hemos hecho de algunas anécdotas vividas entre nosotros en el seno de nuestros respectivos Blogs.
Dorta me parece una persona íntegra que sufre profundamente los vaivenes políticos que se desprenden de nuestros representantes corruptos. En ese sentido también yo sufro en otras latitudes del mismo mal que él.
A Bruno lo encontré encantador y ávido en conocer detalles sobre la generación a la que pertenecemos y entre la que conservamos amigos comunes: tal es el caso de Luis Espinosa, Santacreu, Pepe Martín y otros muchos.
Para ilustrar este modesto comentario y como homenaje a cada uno de ellos me valdré de algunas fotografías tomadas en mi reciente visita a la isla

miércoles, 3 de febrero de 2010

7) PONERLES NOMBRE, ¡por favor!

Recuerdo que me solicitó un sencillo reportaje en blanco y negro para su álbum particular.

Por aquellos años trabajaba como dependienta en la Librería Internacional sita en la Avda. de Venezuela, junto a la Heladería Italiana.

Lamento no recordar su nombre pero creo que también vivía en LA OROTAVA aunque no sólo por esa razón la he traido hasta aquí  sino por la tremenda expresividad que  muestra su rostro en esta fotografía en concreto y que tanto le agradó en su día.

Le deseo buena suerte

¿Puede alguien aportar algún otro dato?

6) PONERLES NOMBRE, ¡por favor!

De origen italiano, de nombre Ketty.
Contrajo matrimonio entonces con un apuesto joven llamado Carlos Hamilton cuya familia poseia una preciosa mansión de estilo inglés en la zona llamada de El Durazno, situada cerca de la carretera del Botánico.

Dió a luz un precioso niño a quién creo haberle tomado  algunas fotografías. Desde entonces no he vuelto a saber nada de ellos.

Espero y deseo que todo les vaya bién

5) PONERLES NOMBRE, ¡por vafor!

Cierto día, entré en un Bar cuyo nombre no recuerdo en compañía de alguien que tampoco ahora recuerdo. Por la luz que desprende la foto debió ser a media tarde en cualquier lugar del valle. Fumaba de forma compulsiva y eso, seguramente, llamó entonces mi atención y...disparé. Este es el espotáneo resultado. Una bella foto con mucho movimiento y dotada de una total naturalidad. Para realzar su imagen me he permitido aislarla de todo cuanto en aquel momento acontecía a su alrededor.

¿Puede alguien proporcionar algún dato más?

4) PONERLES NOMBRE, ¡por favor!

Esta otra joven formaba parte del entorno de las anteriores y en concreto, si mal no recuerdo, del de Myriam Machado. Es probable, incluso, que pertenecieran a la misma  familia pero no me atrevería a afirmarlo con rotundidad. Jamás crucé una palabra con ella pero creí advertir en su talante un aire de disciplina, responsabilidad y distinción que se contraponía, -y es por eso que llamaba tan poderosamente la atención-,  al  estilo, en general, imperante por aquellos años , considerados por la mayoría de jóvenes como la prodigiosa y alegre década de los 70.

martes, 2 de febrero de 2010

3) PONERLES NOMBRE, ¡por favor!

El PAPRIKA fué un Bar musical de mi co-propiedad situado en el número 6 de la Calle Puerto Viejo del Puerto de la Cruz, casi enfrente de una coqueta tienda de regalos cuya propietaria y dependienta es, precisamente, la que aparece en esta foto.

Manteníamos la discreta amistad que corresponde entre buenos vecinos pero ello no impediría que un determinado día la fotografiara ante el quicio de la puerta de su interesante establecimiento; esta es precisamente una de las varias fotos tomadas entonces.

Lo único que recuerdo es que, como el resto de jóvenes traidas hasta aquí, también es de LA OROTAVA y que su establecimiento pudiera muy bién haber sido el del nº 5 de la calle de Puerto Viejo.

2 bis) PONERLES NOMBRE, ¡por favor!

Esta otra simpática joven es hermana de la anterior y siempre intuí que era la mayor de las dos.

Las fotos poseen ese "glamour" tan característico del estilo de los años 70 y creo que en eso precisamente consiste su verdadero encanto y no tanto  en su calidad técnica. Al fín y al cabo se trataban de instantáneas de lo que hoy día se podría considerar como un "robado".

Si alguna vez se dieron cuenta de que las fotografiaba, es cierto también que nunca me lo impidieron, por lo que les estoy profundamente agradecido ya que, en realidad, cada foto constituye por si misma un documento gráfico sociológico de una cierta importancia para mí por todo lo que representa del estilo de una determinada generación que con bastante asíduidad se daba cita en  el Puerto de la Cruz de entonces.

2) PONERLES NOMBRE, ¡por favor!

Lo único que puedo decir de ámbas, (esta joven y la siguiente), es que son hermanas, muy simpáticas y de La Orotava. Nunca tuvimos una excesiva confianza pero sí un amistad cordial como corresponde a gente educada que se conoce a través de amigos comunes. Espero que la vida les haya sonreido en la misma medida que, por lo menos, lo ha hecho conmigo en Barcelona. Lo que sí recuerdo es que esta foto está tomada en el genuino Café de Paris de la era del pianista valenciano Leopoldo Ortí.





1) PONERLES NOMBRE, ¡por favor!

A partir de hoy y durante algunos días me gustaría comenzar con una nueva sección en colaboración con el interesante Blog villero de Bruno Abreu y con cualquier otra persona que desee sumarse a esta iniciativa por mi reemprendida desde Barcelona a través de mi propio Blog.

Se trata de intentar reconocer y ponerles nombre a cada una aquellas jóvenes cuyas fotografías fueron tomadas por mí hará ya unos 35 años; cuando el Puerto era el Puerto.

Siempre he lamentado haber olvidado sus nombres y apellidos aunque nunca su procedencia: LA OROTAVA.
Espero que mis indagaciones obtengan el resultado apetecido y pueda así bautizar nuevamente a las que durante unos días  desfilarán por ese interesante Blog después de haber permanecido tantos años sin nombre alguno en mis archivos fotográficos.

Es muy probable que esta joven pertenezca a la familia MACHADO.

sábado, 21 de noviembre de 2009

D.TOMÁS DE IRIARTE y CONCHIBEL (...de fábula)


Concepción Padrón o lo que es lo mismo, CONCHIBEL, nombre por el que la conocí en su, -para mí-, eterna juventud en virtud de  la edad que siempre ha representado en las fotos de adolescente que aún conservo, me envia un valioso regalo; un testimonio literario recuperado por su marido e incluido hace algún tiempo en uno de sus libros publicados.


Al parecer, y según testimonio de la propia CONCHIBEL, se trata de un poema de Tomás de Iriarte  que vió la luz en una carta manuscrita por este al que en aquella época suya era alcalde del Puerto de la Cruz y cuyo nombre ella lamentablemente no recuerda. La carta figura en el Archivo Municipal y el poema rescatado en su dia por D. Pedro Montesdeoca, pariente de CONCHIBEL, le era recitado por este a la niña de entonces cuando ella contaba tan sólo unos 12 años. Años más tarde, la propia CONCHIBEL lo recuperaría para un trabajo universitario sobre el Puerto de la Cruz:

"Junto al mar siempre agitado,
y en el valle de Taoro
se alza un pueblo que de oro
la vid hízole agraciado.
Él, recuerdo, fué mi encanto
al ver mis ojos la luz,
y a él le ofrezco este canto
por ser, Puerto de la Cruz,
solar a quién quiero tanto"

lunes, 31 de agosto de 2009

MÁS PROFESIONALES


Desde muy temprana edad, estos jovenes se curtían adecuaAñadir imagendamente formando parte de las excelentes plantillas de comedor en los distintos restaurantes de los muchos y magníficos hoteles que caracterizaron al Puerto de la Cruz en las décadas de los 70-80.
La mayoría de ellos lograrían alcanzar con el tiempo el status de profesional al ir pasando por las distintas categorias que se exigian en el seno de las muchas brigadas de trabajo que ofrecían, sobre todo, excelente formación. Otros llegarían a gozar de la máxima categoria: la de maître cuando no, incluso, la de director de hotel.
En la foto de la izquierda podemos apreciar a un Encho Molina, aún joven, posiblemente en calidad de maître, entre otros cuatro adultos con categoría de camareros. A la derecha, cinco jóvenes, niños aún, quienes por su indumentaria figuran, con toda seguridad, en calidad de aprendices.
No hay que olvidar que el Puerto de la Cruz se convertiría en sí mismo en una gran escuela de hostelería de donde habrían de salir excelentes profesionales hacia el resto de la isla.

OTROS PROFESIONALES DE LA HOSTELERÍA


Con frecuencia tuve ocasión de fotografiar a muchos profesionales de la hosteleria gracias a la condición y a la influencia que mi padre, como barman que fue del Dinámico y el Oasis, respectivamente, ejercía poderosamente sobre mí. Una profesión de la que yo conocía sus más recónditos entresijos y que por ello o, tal vez, pese a ello me facilitaba el acceso directo hasta sus auténticos protagonistas.
En el tríptico superior, a la izquierda, aparece la figura de Roberto (yo le llamaba Robert; su bigotito me recordaba al actor Robert Taylor) quien durante muchos años sirvió en el comedor del modesto restaurante Casa Antonio del Puerto de la Cruz adonde acudíamos a comer los más necesitados. En el centro figura un simpático joven que por su indumentaria es casi seguro que aún permaneciera en calidad de ayudante en algún Hotel de la ciudad. En el extremo de la derecha podemos ver, tras su franca sonrisa, a Diego, en las dependencias del Café de París donde trabajaba por entonces.
La foto doble inferior corresponde a la terraza de San Telmo. En ella aparecen, aparte del propietario del Bar, una serie de personajes también vinculados directa o indirectamente con la explotación hostelera. De todos ellos sólo recuerdo sus figuras pero no sus nombres. Sólamente el de Lechado, cuyo brazo apoya en la barra mietras come, y el mote, -que por respeto no pretendo ahora publicar-, de aquel otro que fuera un excelente futbolista al que no ví jamás jugar pero que sí me consta y que aparece en la fotografía inferior sentado, durante un breve descanso, junto a su compañero con gafas.

domingo, 30 de agosto de 2009

EL DINÁMICO DURANTE LAS FIESTAS


La avalancha de gente que se producia en la terraza del Bar Dinámico, arrastrada por los alegres compases de los "pasacalles" interpretados por las bandas bávaras, chocaba frontalmente contra el esfuerzo laboral de estos profesionales de la hosteleria que se veían obligados, en tiempo record, a calmar el hambre y la sed de los cientos de clientes que se daban cita casi de improviso frente a la barra del bar y al amparo de la siempre fresca sombra que proporcionaban los hermosos laureles de Indias que crecían en la Plaza del Charco.
No de todos recuerdo sus nombres pero sí el de Heraclio, por ejemplo, que como la mayoría de ustedes podrán suponer proviene de Heracle o lo que es lo mismo de Hércules. Nada más lejos de la verdad porque nuestro amigo Heraclio, aparte de no ser lo que se entiende por un atleta, era de muy modesta estatura lo que no le privaba de ser sumamente generoso, servicial y poseedor de una gran cortesía que se traducia en la mayor parte de las veces en un exclente trato con sus clientes y amigos. Para aquellos que desconozcan algunas de las actividades lúdicas llevadas a cabo por Heraclio antes de su llegada al Puerto desde Santa Cruz debo añadir que, por lo menos, en una ocasión que yo recuerde, formó parte, -tocando los platillos-, de la mítica "murga" NI FU NI FA que tanta alegría derrochara por aquellos años durante las celebraciónes de los carnavales tinerfeños. Mi padre, de mucha mayor estatura, permanecía tocando el bombo a su lado, hecho que dotaba a la murga de una nota extra de extravagancia y comicidad.
¿Que puedo decir de Jerónimo que no tenga que ver con su desconcertante carácter?. No obstante, por el simple hecho de poder acudir cada día a disfrutar bajo la sombra de los laureles de un "cortadito" en el Dinámico yo solía dispensarle de su aparente intolerancia hacia todos y cada uno de nosotros.
Recuerdo que Perdomo derrochaba una simpatía fuera de lo común; tanta, que le hacía acreedor de una franqueza tan extraordinaria que jamás, aunque se lo propusiera, conseguía herir la susceptibilidad de sus muy numerosos clientes.
El veterano Paco era un hombre tan religioso como circunspecto. Resultaba dificil que admitiera una broma y en este sentido había que andar con mucha precaución porque tenía la rara tendencia de malinterpretar todo lo que uno nunca quería decir. Con todo, le guardábamos un aprecio sincero y un profundo respeto.
Fernando, hijo de Lola la del "carrito".
Antonio Brito, gran aficionado al noble deporte del boxeo.
José María, silencioso, respetuoso y educado.
A todos ellos mi más sincero agradecimiento por su entrega, profesionalidad y por la estrecha amistad nacida a tenor tantas coincidencias mutuas, mantenidas no solo dentro y fuera de la Plaza del Charco sino también del popular Bar Dinámico donde por entonces trabajaban.